A pesar de contar con un permiso de trabajo y de no tener antecedentes penales, Kilmar Ábrego García fue detenido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y deportado a una peligrosa cárcel en El Salvador, situación que podría enfrentar cualquier migrante, alertó una jueza federal.
De acuerdo con CBS News, declaró: "Se aferran a la proposición de que pueden expulsar por la fuerza a cualquier persona, ya sea migrante o ciudadano estadounidense, a presiones fuera de Estados Unidos, y luego afirman sin rodeos que no tienen forma de lograr su retorno porque ya no son custodios, y por lo tanto, la corte carece de jurisdicción".
Su declaración hizo referencia justamente al caso de Ábrego García, un joven salvadoreño de 29 años y residente de Maryland que fue acusado por las autoridades migratorias de tener vínculos con la banda criminal MS-13, razón por la cual fue enviado a una prisión en El Salvador.
No obstante, de acuerdo con la jueza Xinis, hay poca o ninguna evidencia que respalde las acusaciones. "Como reconocen los acusados, no tenían autoridad legal para arrestarlo, ninguna jurisdicción para detenerlo y ningún motivo para enviarlo a El Salvador y mucho menos entregarlo a una de las cárceles más peligrosas del hemisferio occidental".
La Casa Blanca aceptó que la deportación del salvadoreño había sido un error administrativo, aunque continúa catalogándolo como miembro de la Mara Salvatrucha y se ha negado a acatar la petición de la jueza de regresarlo a Estados Unidos.
El Departamento de Justicia ha argumentado que el tribunal no tiene poder para ordenar el regreso del migrante debido a que ello interfiere con los poderes de política exterior del presidente Donald Trump.
Y los abogados del Departamento de Justicia continúan afirmando que el hombre es miembro de una organización terrorista, por lo que no puede acogerse a una protección. Agregaron que la jueza no había presentado pruebas convincentes para justificar su orden judicial.
Migrantes acusados de nexos con organizaciones criminales han sido deportados a El Salvador. Foto:Ice
Salvadoreño expulsado de Estados Unidos tenía una orden que impedía su deportación
El caso de Kilmar Ábrego García ha llamado la atención no solo debido a que fue llevado a una prisión de El Salvador sin pruebas suficientes de que es miembro de la pandilla criminal MS-13, sino porque contaba con una orden que impedía su deportación.
De acuerdo con NBC, en el año 2006 Ábrego García huyó de El Salvador a Estados Unidos, escapando de la violencia de las pandillas que lo acosaron, golpearon y amenazaron con secuestrarlo.
En 2019, fue arrestado en Estados Unidos y acusado de pertenecer a la Mara Salvatrucha. Las autoridades aseguraron que un informante confidencial lo había señalado como miembro activo de la organización criminal.
En ese entonces pudo refutar las acusaciones y un juez le otorgó una orden que impedía su deportación, debido a que regresarlo a El Salvador implicaba un alto riesgo de tortura o muerte. Finalmente fue puesto en libertad, hasta que hace unas semanas fue expulsado.