'Soy hija única y me mudé lejos de mis padres; me siento cada vez más culpable'

Una mujer que residía en Nueva York junto a su pareja y decidió mudarse hace ocho años a París, Francia, para criar a sus hijos, reveló que padece un gran sentimiento de culpa debido a que es hija única y sus padres están a más de 16 horas de vuelo, ubicados en Tucson, estado de Arizona, Estados Unidos.

Mudarse lejos de la familia siempre conlleva obstáculos sentimentales con lo que representa la distancia, y Collen De Bellefonds ya había experimentado esta sensación cuando se desplazó desde Tucson, donde vivía con su padres, a Nueva York. 

En un artículo publicado por el medio Business Insider, Collen relató que decidió mudarse a París poniendo en primer plano la crianza de sus hijos y hoy, a más de 16 horas de vuelo de distancia de sus padres, la decisión resuena en su cabeza, debido a la dificultad que representa visitarlos. 

"La primera vez que fuimos a visitarlos, fue un desastre", indicó, y luego contó la odisea que atravesó en aquella visita, con su perra orinándose en el aeropuerto y las necesidades de su hija menor de solo seis meses de edad.

Más allá de todos los problemas que acarrea la visita a la familia, la joven enfatizó luego en la culpa que tiene a causa de que sus padres están envejeciendo y "cada vuelo es más duro".

La culpa de una hija única

Al no tener una hermana con quien compartir el cuidado de sus padres mayores, todas las responsabilidades recaen en ella. "Sé que llegará un momento en que no puedan viajar con nosotros cuando necesiten a alguien que los cuide. Yo soy la única persona indicada para ese papel", escribió.

En su conclusión, Bellefond analizó que todos tomamos decisiones "y no somos capaces de apreciar a dónde nos llevarán esas decisiones hasta que ya hemos pasado esa encrucijada". Alejada por más de 8.000 kilómetros de sus padres, la mujer ahora considera que viajar será cada vez más fácil a medida que sus hijos crecen, y la nueva casa que adquirieron sus padres es un nuevo incentivo para volver a reunirse pronto.