El síndrome de Tarzán es una situación que ocurre cuando una persona comienza una nueva relación sin haber superado emocionalmente su relación anterior. Esto genera incomodidad, ya que la nueva relación no puede evolucionar de manera adecuada.
Conforme a los criterios de
Uno de los miembros de la pareja siempre estará emocionalmente atrapado en el pasado, lo que limita el crecimiento y desarrollo de la relación actual.
El nombre de este síndrome proviene del personaje ficticio de Tarzán, conocido por moverse a través de las enredaderas sin soltar una antes de tener otra asegurada.
De manera similar, quienes padecen este síndrome inician una nueva relación sin haber cerrado emocionalmente la anterior, repitiendo así un patrón de dependencia emocional.
Las causas más comunes del síndrome de Tarzán incluyen el miedo a la soledad y la incapacidad de lidiar con el vacío emocional. Esta situación provoca un "efecto anestésico", que impide al individuo reflexionar sobre sus errores, perpetuando patrones disfuncionales y dificultando el proceso de autoconocimiento.
El síndrome de Tarzán puede desencadenar problemas emocionales más graves, como ansiedad, depresión y baja autoestima.
Las personas que lo experimentan tienden a depender de la validación de su pareja para sentirse completas, lo que afecta su bienestar emocional y su capacidad para construir relaciones saludables.
Para superar este problema, es fundamental desconectar por completo de las relaciones pasadas. Soltar verdaderamente la "enredadera", como en la metáfora de Tarzán, permite evolucionar emocionalmente y aferrarse plenamente a una nueva relación, sin cargas del pasado que obstaculicen el crecimiento personal.
O Globo Brasil / GDA.
Más noticias
*Este contenido fue escrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basada en información de O Globo Brasil / GDA. Contó con la revisión de un periodista y un editor.