Es común que, debido a la rutina y la falta de tiempo, se utilice el periodo destinado para comer en otras actividades, lo que lleva a consumir los alimentos de manera apresurada. Sin embargo, expertos revelaron que este hábito puede afectar negativamente la salud.
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Cristina Bedmar, nutricionista y profesora de Ciencias de la Salud de la Universitat Oberta de Catalunya, afirmó que ingerir una comida de manera acelerada, sin hacer pausas entre bocados, “no solo puede provocar dolores gástricos o reflujo gastroesofágico, sino que puede dar lugar a problemas de distensión abdominal y malestar por gases”.
Sumado a esto, consumir los alimentos en menos de 20 minutos puede traer consecuencias graves al organismo, como la aparición de enfermedades vinculadas con el sobrepeso.
¿Qué recomiendan los expertos?
Uno de los consejos más frecuentes de dietistas y nutricionistas respecto al tema, recae en el hecho de comer sin distracciones. Ver películas o estar con el celular mientras se alimenta, puede hacer que pierda la concentración, comiendo de forma automatizada.
Además, la velocidad de la ingesta puede incrementar las probabilidades de aumentar de peso. Según Jordi Salas-Salavó, investigador de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición, “cada vez hay más evidencia de que la velocidad con la que comemos influye tanto en el peso corporal como en la adiposidad. También se asocia a los triglicéridos altos en plasma”.
No obstante, los profesionales de la salud también afirman que el proceso de masticar activa mecanismos fisiológicos que generan señales al cerebro.
“Con una ingesta rápida nos saltamos mecanismos fisiológicos que informan al cerebro de cuánta comida es suficiente, no da tiempo a que esas señales lleguen al cerebro y si se hace de manera reiterada, se acumula energía en forma de grasa”, relató Miguel Ángel Martínez Olmos, jefe del Servicio de Endocrinología del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela.
Como un efecto nocivo adicional al comer rápido, el peligro de atragantarse es latente, sobre todo en niños y personas de la tercera edad.
Consejos para organizar el tiempo y comer de manera saludable
- De ser posible, se recomienda que coma en compañía, ya que estar rodeado de amigos o familiares aumenta la conciencia del consumo y le da tiempo de socializar, disminuyendo la velocidad en la que ingiere los alimentos.
- En dado caso de que la compañía sea limitada, busque que el horario en el que coma esté libre de responsabilidades, planificando el tiempo para cocinar y consumir grupos de alimentos proteicos.
- Acompañe los alimentos con productos de origen integral o crudos, ya que las frutas o ensaladas requieren de más tiempo en el proceso de masticar para poder pasar.
- Alimentarse con el uso de cubiertos ayuda a reducir la velocidad al momento de comer. Utilizar un tenedor o cuchillo, incrementa el tiempo que se dedica a cada bocado, dándole al cuerpo el periodo necesario para registrar la sensación de saciedad.
JOHAN STEVEN GUERRERO.
EQUIPO ALCANCE DIGITAL.
EL TIEMPO.