Pensó que una mancha en su uña era normal y luego descubrió que tenía cáncer

Una mujer de Kent, Inglaterra, se enfrenta a la posibilidad de tener que atravesar distintos procedimientos médicos, luego de que le diagnosticaran una fuerte enfermedad que podría llegar a ser mortal.

Kelly Heather, de 38 años de edad, notó una línea tenue y oscura que se encontraba en la mitad de su uña por primera vez en el 2017. Ante este descubrimiento, la mujer visitó a su médico de confianza y luego de una serie de estudios le aseguraron que no era nada grave.

A pesar de que en una primera ocasión no demostró ser un problema realmente preocupante, luego de tres meses la raya se volvió más oscura y gruesa. Al acudir nuevamente a un hospital, Kelly fue derivada a un dermatólogo.

Al realizarle una biopsia, notaron que lo que estaba creciendo en la uña de la mujer era un melanoma, la forma más mortal que existe del cáncer de piel. En el caso de Heather, cuando crece bajo la estructura se le conoce médicamente como melanoma subungueal.

A Kelly tuvieron que retirarle el lecho ungueal para evitar que la enfermedad se propagara. Al terminar la cirugía le aseguraron que el procedimiento había salido completamente bien y que no quedaba ningún rastro del cáncer.

Luego de seis meses le apareció una verruga en la punta del dedo a la mujer, una señal clara de que la afección había regresado. Los médicos tuvieron que apuntar parcialmente la zona para eliminar la enfermedad. “Les dije que lo que necesiten, lo tomen. Prefiero eso a que se propague a cualquier otro lugar”, fueron las palabras de Kelly.

La señora Heather solicitó al hospital que le hicieran más exploraciones para asegurarse de que no habían células cancerígenas en su organismo, pero su solicitud fue rechazada. Un poco más de dos años después, en el 2022, se descubrió un bulto en una axila.

Ante esto tuvo que someterse a más procedimientos para retirar las zonas afectadas por el cáncer. Luego de esto, los médicos le informaron que su afección ahora era un melanoma metastásico, pues se propagó por completo a otra parte del cuerpo.

Después de estar un año completo en un tratamiento de inmunoterapia, los análisis de Kelly arrojaron resultados positivos, por lo cual parecía estar libre del cáncer. Sin embargo, en 2024 se embarazó de su cuarto hijo y a las 35 semanas descubrió que no podía mover correctamente su pierna izquierda.

Luego de algunos exámenes, los médicos descubrieron un tumor ubicado en el cerebro de la señora Heather, muy similar al inicial encontrado bajo su uña. Luego de dar a luz a su bebé, Kelly tuvo que someterse a una cirugía adicional para poder extirpar la masa.

Durante la cirugía no pudieron extirpar completo el bulto, pues podrían haberle causado una parálisis en el lado izquierdo de su cuerpo a la mujer. Por el momento, se encuentra esperando en qué lugar de su organismo surgirá próximamente la enfermedad, pero mantiene una actitud positiva. 

ERIKA LUCIA IBAÑEZ GARCIA

REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL 

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