Las papas fritas son un acompañante popular en comidas rápidas y eventos sociales, y muchas veces se disfrutan con diferentes salsas como tomate o mayonesa. Sin embargo, un estudio de la Universidad Estatal de Pensilvania, en Estados Unidos, advierte sobre los riesgos de esta práctica común, que podría llevar a consumir casi el doble de calorías.
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Según la investigación, la combinación de un aperitivo salado con una salsa incrementa significativamente la ingesta calórica. Los resultados mostraron que las personas consumían un 77 por ciento más de calorías cuando las papas fritas se servían con salsa.
La presencia de salsa no solo no redujo el consumo del aperitivo principal, sino que adicionó más calorías al total consumido, dado que los participantes no comieron menos papas fritas, tal y como esperaba John Hayes, profesor de ciencia de los alimentos y director del Centro de Evaluación Sensorial de Penn State.
Durante el estudio, los 46 participantes adultos asistieron al laboratorio universitario en dos ocasiones, consumiendo 345 calorías de aperitivos y salsa por sesión, en comparación con las 195 calorías de los aperitivos solos.
“El descubrimiento más sorprendente de nuestro estudio es que las personas no comieron menos papas fritas cuando había salsa disponible; comieron la misma cantidad de papas fritas, además de la salsa”, dijo Hayes.
¿Y la obesidad?
Este fenómeno es especialmente relevante en el contexto de la creciente prevalencia de la obesidad mundial. Un estudio publicado por 'The Lancet', con el respaldo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), estima que más de mil millones de personas, uno de cada ocho en el mundo, sufren de obesidad.
Además, la investigación de la Universidad de Lund en Suecia vincula la obesidad con un mayor riesgo de desarrollar hasta 32 tipos de cáncer, incluyendo algunos recientemente asociados como el melanoma maligno y cánceres de órganos reproductivos.
Expertos en salud sugieren que el incremento en el consumo de alimentos ultraprocesados y un estilo de vida sedentario son factores clave en el aumento de casos de obesidad.
La recomendación general para mantener un peso saludable es que las mujeres consuman alrededor de 2000 calorías diarias y los hombres unas 2500, según la necesidad energética individual. Sin embargo, el estudio recalca la importancia de la moderación, especialmente en situaciones sociales donde es fácil excederse con combinaciones apetitosas pero calóricamente densas como las papas fritas con salsa.
O Globo (Brasil) / GDA
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*Este contenido fue escrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basada en información de O Globo (GDA), y contó con la revisión de un periodista y un editor.