La construcción en el Caribe colombiano enfrenta una posible parálisis debido a una deuda de un billón de pesos que el Instituto Nacional de Vías (Invías) mantiene con constructores, consultores e interventores de proyectos.
Esta situación compromete directamente al menos ocho iniciativas estratégicas para la región, según informó la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI).
Entre los proyectos más afectados se encuentra la conexión puente Pumarejo-Ciénaga y viaductos, con un presupuesto de 657 mil millones de pesos, considerada fundamental para mejorar la movilidad entre Atlántico y Magdalena.
Además, la conexión en la Alta Guajira, que abarca las vías Uribia-Puerto Bolívar-Cabo de la Vela-San Martín, también está en riesgo.
Este último tiene una inversión proyectada de 208 mil millones de pesos y es clave para el desarrollo de las comunidades Wayú.
Héctor Carbonell, director Ejecutivo de la regional Norte de la CCI, destacó que otras iniciativas, como la variante Magangué y la transversal Momposina, con 221 millones de pesos comprometidos, también podrían detenerse.
A esta lista se suman proyectos como el corredor Santa Lucía-Moñitos, en Córdoba, valorado en 178 mil millones, y otras obras en Bolívar, Atlántico y Cesar.
Son iniciativas esenciales que el propio Gobierno ha venido promoviendo y que ahora están en vilo. La falta de pagos no solo afecta la infraestructura, sino también proyectos de servicios públicos
Héctor CarbonellDirector Ejecutivo de la regional Norte de la CCI
“Son iniciativas esenciales que el propio Gobierno ha venido promoviendo y que ahora están en vilo. La falta de pagos no solo afecta la infraestructura, sino también proyectos de servicios públicos”, subrayó Carbonell.
La CCI también señaló que otras entidades, como el Departamento para la Prosperidad Social (DPS), el Ministerio de Vivienda, y algunas gobernaciones y alcaldías, presentan retrasos en los pagos, lo que agrava la situación en el sector.
Esta crisis pone en evidencia el impacto directo de las deudas estatales en la conectividad, el desarrollo de las comunidades y la estabilidad de la industria constructora en el Caribe colombiano.
Consecuencias para la región Caribe
La paralización de estos proyectos tiene implicaciones más amplias para la región Caribe, que ya enfrenta un considerable rezago en materia de infraestructura.
La falta de avances en estas obras afectará directamente el transporte y la comercialización de bienes e insumos, tanto del sector productivo como de consumo de los hogares.
Esto, a su vez, podría generar un aumento en los costos de los productos y en la operación logística, con un impacto negativo en la economía local y nacional.
La CCI concluye haciendo un llamado a las autoridades competentes, "que tomen medidas urgentes que permitan solventar esta situación y evitar un colapso en la ejecución de proyectos viales fundamentales para el desarrollo de la región Caribe".
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LEONARDO HERRERA DELGANS leoher@eltiempo.com y en X:@leoher70