En el Aeropuerto Internacional José María Córdova de Rionegro, Antioquia, aterrizó este lunes un vuelo con 43 colombianos desde Panamá. Dicho vuelo causó expectativa pues el gobierno colombiano pidió a las autoridades panameñas reprogramarlo, pero finalmente llegaron a un acuerdo para transportarlos en condiciones dignas.
Del total de connacionales, 36 fueron deportados y 7 expulsados por las autoridades panameñas. Una vez en territorio colombiano, Migración Colombia llevó a cabo el procedimiento correspondiente de control migratorio.
En entrevista con EL TIEMPO, la canciller Laura Sarabia, quien viajó el pasado 30 de enero a Ciudad de Panamá y se reunió con su homólogo Javier Martínez-Acha, anticipó el vuelo.
"El 3 de febrero llegará un vuelo desde Panamá. El canciller nos confirmó que los deportados no serán embarcados encadenados; únicamente viajarán en condiciones especiales aquellos con compromisos penales", comentó.
La noticia cobra relevancia pues ocurre en medio de la tensión entre Colombia y Estados Unidos por las condiciones en las que viajan los colombianos deportados desde territorio norteamericano.
El presidente Gustavo Petro indicó que su administración le propuso a la Casa Blanca asumir el regreso de todos los deportados colombianos en ese país.
"A Mauricio Claver-Carone, enviado especial por el presidente Trump para América Latina, le hemos propuesto asumir de manera inmediata el traslado de todos los ciudadanos colombianos deportados por los Estados Unidos", informó la Cancillería.
Para tales efectos se evalúan en este momento todas las opciones de traslado aéreo y marítimo, teniendo en cuenta "la mayor responsabilidad fiscal de acuerdo a las instrucciones del señor Presidente".
Los vuelos
Tras dar por superadas las tensiones, el Gobierno colombiano envió a EE.UU. tres vuelos de la Fuerza Aereoespacial Colombiana (FAC) que trajeron 306 connacionales.
De acuerdo con la Cancillería, desde el domingo 26 de enero se está trabajado en la elaboración de un protocolo de atención para la población migrante en procesos de deportación.
"Todo el esfuerzo de comunicación entre Colombia y Estados Unidos está enfocado en encontrar la mejor vía para el traslado de los migrantes, ya sea por mar o por aire. Lograremos una solución concertada que garantice su regreso en condiciones dignas y con pleno respeto a sus derechos humanos", sostuvo Sarabia.
De no llegar a un acuerdo con Washington, el presidente Petro planteó la posibilidad de acudir a una consulta popular para definir el futuro de los deportados colombianos en EE.UU.
JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ
Redacción Política