Con la entrada ya anunciada por el presidente Gustavo Petro de dos nuevos codirectores a la junta directiva del Banco de la República, ya tres de los cinco miembros son personas nombradas por el mandatario, lo que hace suponer que en votaciones futuras podría haber decisiones afines a lo que espera el Gobierno.
Este miércoles, se conoció que, para el relevo que ordena la Constitución, serán nombrados como nuevos codirectores los economistas Laura Moisá y César Giraldo, pero en el momento de esta publicación no se había indicado quiénes serían los actuales codirectores que saldrían.
El hecho es significativo, pues el Gobierno viene pidiendo que losrecortes de las tasas de interés sean más rápidos de lo que se viene haciendo, pero, en particular, por las ideas que ha planteado el presidente Gustavo Petro de que el Banco de la República le preste dinero al Gobierno, que atraviesa por una dura crisis financiera, con un bajo recaudo por parte de la Dian pese a la reforma tributaria en la que surgieron nuevas cargas tributarias, en el 2022.
Un préstamo de recursos del banco central al Gobierno implica emitir o crear dinero sin respaldo en la actividad real, con el fin de financiar el hueco fiscal, y expertos advierten que ese tipo de decisiones son las que han llevado a las hiperinflaciones sufridas por países como Argentina o Venezuela.
Se podría pensar que la entrada de los nuevos dos codirectores aceleraría las bajadas de las tasas de referencia, pero, en cuanto a la posibilidad de emitir dinero para financiar el Gobierno, hay razones para ver que no habría efecto en las actuales circunstancias.
Las posibilidades de recortar las tasas de interés de forma más agresiva
En principio, se podría pensar que con los nombramientos de Moisá y Giraldo, el ritmo de bajar las tasas que reclama el Gobierno podría tener mayoría, junto al voto del ministro de Hacienda. La otra codirectora nombrada por el actual gobierno es Olga Lucía Acosta, designada hace dos años.
Sin embargo, si bien los codirectores son nombrados por el Presidente, una vez son parte de la junta directiva son independientes del Gobierno. Por lo tanto, su voto obedece a su criterio técnico y no a alguna subordinación al Ejecutivo, pues no la hay.
Se presumiría que las posiciones técnicas de los nuevos miembros de la junta serían más cercanas al pensamiento económico del Gobierno que las de los dos codirectores que sean remplazados, pero no necesariamente que coincidan de manera absoluta.
Por ejemplo, en la más reciente votación, en la junta de diciembre, la tasa de interés se redujo de 9,75 a 9,5 por ciento. Cinco de los codirectores votaron por un recorte de 0,25 puntos; uno lo hizo por una reducción de 0,50 puntos y otro por una disminución de 0,75 puntos.
Claramente, el Ministro de Hacienda no hizo parte del grupo mayoritario que votó por 0,25, lo que indica que la codirectora Acosta, nombrada por el actual gobierno, tuvo un voto (cualquiera que haya sido) independiente y distinto al voto del Ministro.
La posibilidad de que haya emisión de dinero sin respaldo
En cuanto a las posibilidades de un préstamo directo del Emisor para financiar al Gobierno que atraviesa una crisis en sus finanzas, el presidente Gustavo Petro varias veces a sugerido que "para reparar las víctimas en el corto plazo, en el plazo de sus vidas, es necesario emitir dinero por parte del Banco de la República", porque no hay dinero suficiente en el presupuesto nacional para ese fin.
El presidente Petro ha insistido en la necesidad de emitir sin entregar el dinero creado a la banca. Foto:Carlos Ortega, Archivo / EL TIEMPO
Según el mandatario, su idea no es de "emisión vía crédito al Gobierno" sino de emisión normal que hace el Banco de la República, "pero que en vez de pasar como transferencia a los bancos pase como transferencia a las víctimas".
Pero conocedores del tema, como el exviceministro de Hacienda Francisco Azuero, profesor de la Universidad de los Andes, han advertido en otras oportunidades (ante la idea del presidente) que el Banco de la República no puede transferir recursos a particulares, solamente a la banca y al Gobierno, que son los únicos que tienen cuentas en el Emisor.
Emitir para prestar o emitir para donar
En todo caso, ha dicho Azuero, si se hiciera y, no se tratara de un crédito (como asegura Petro), sería una donación, cosa que se le prohíbe al banco central.
Y aún si fuera posible emitir dinero para donar, como no hay contrapartida, se constituye una pérdida en el ejercicio del banco, y el Gobierno mismo, al que el banco central le debe entregar utilidades, terminaría perdiendo. "Es una vuelta -dijo Azuero- que no le ahorra nada al Gobierno. La plata no viene del Cielo".
Lo cierto es que una decisión en ese sentido necesita de un voto unánime de los 7 integrantes de la junta, lo que no es factible. Además de que el gerente y los codirectores nombrados antes del actual gobierno posiblemente no apoyen una propuesta en ese sentido, los nuevos codirectores también actúan con independencia.
Según Freddy Castro, consultor, analista económico y ex director de Banca de las Oportunidades, y quien fue alumno de Giraldo en la Universidad Nacional, este nuevo codirector sí podría estar a favor de posturas como reducir con celeridad las tasas de interés o hacer créditos directos.
De acuerdo con Castro "la materialización de las preocupaciones depende del número de votos. Recordando que aunque Olga Lucía Acosta fue nombrada en este Gobierno, ha tenido posturas independientes, no veo factibles ni préstamos directos del Banco al Gobierno (porque requiere unanimidad), ni otros escenarios que precisan de mayorías, como reducciones aceleradas de tasas de interés o agresiva intervención cambiaria. Tampoco sería probable elegir a un nuevo gerente general, porque esa elección se hará en 2028". Para ese momento, ya votaría el ministro de Hacienda del siguiente periodo presidencial.
"Esos riesgos se empezarían a materializar si alguno de los codirectores renuncia", concluye Castro.