El departamento del Atlántico se encuentra en alerta naranja debido a las fuertes brisas y el alto oleaje que afectan la región Caribe, según las autoridades meteorológicas del IDEAM. Las condiciones actuales han llevado a la Gobernación del Atlántico a reforzar medidas preventivas y a emitir recomendaciones a la población, especialmente en los municipios costeros.
Nelson Oquendo, subsecretario de Gestión del Riesgo del Atlántico, informó que la Gobernación se mantiene en constante comunicación con las alcaldías locales para coordinar acciones preventivas y garantizar una respuesta oportuna en caso de emergencias.
Autoridades recomiendan evitar presencia de bañistas en áreas donde las condiciones sean peligrosas. Foto:Vanexa Romero/ El Tiempo
Las medidas incluyen alertas para bañistas, pequeñas embarcaciones y comunidades que puedan estar expuestas a riesgos por las condiciones climáticas.
Oquendo destacó que estas condiciones de fuertes vientos y oleaje son propias de la temporada inicial del año, por lo que pidió a la ciudadanía estar alerta y acatar las recomendaciones de las autoridades. “Insistimos en que los ciudadanos deben mantenerse en alerta y tomar sus propias precauciones”, señaló el funcionario.
El departamento del Atlántico se encuentra en alerta naranja debido a el alto oleaje. Foto:ARCHIVO EL TIEMPO
Los municipios costeros, como Puerto Colombia y Juan de Acosta, son los más vulnerables ante el alto oleaje y las ráfagas de viento. Por ello, se han intensificado las medidas de prevención en estas zonas, incluyendo restricciones temporales para ciertas actividades marítimas y en playas.
Recomendaciones para la comunidad
Las autoridades recomiendan evitar actividades náuticas en embarcaciones pequeñas y limitar la presencia de bañistas en áreas donde las condiciones sean peligrosas. Además, instan a los residentes a asegurar estructuras ligeras y a mantenerse informados a través de los canales oficiales.
El llamado principal es a que la comunidad atienda las disposiciones de las autoridades. Foto:Archivo/EL TIEMPO
A pesar de ser un fenómeno cíclico, las fuertes brisas y el oleaje han causado incidentes menores en temporadas anteriores, lo que subraya la importancia de adoptar medidas preventivas. La Gobernación del Atlántico reitera su compromiso de monitorear continuamente las condiciones climáticas y actuar con celeridad en caso de emergencia.
El llamado principal es a que la comunidad atienda las disposiciones de las autoridades, priorizando la seguridad colectiva y evitando actividades de riesgo durante esta temporada.