La captura y condena de Amparo del Carmen Giraldo Giraldo, alias ‘Natalia’, a 16 años y 11 meses de prisión marca el fin de una carrera criminal que dominó gran parte de la Sierra Nevada de Santa Marta y el departamento del Magdalena.
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Con su caída, se revela el oscuro entramado de violencia, narcotráfico y extorsión que ‘Natalia’, junto con su pareja alias ‘Peligro’, tejieron durante más de dos décadas.
‘Natalia’, hija del reconocido ex capo Hernán Giraldo, había asumido un papel protagónico dentro de la organización criminal Los Pachenca, actualmente conocida como Autodefensas Conquistadores de la Sierra.
Tras años de investigación y con evidencias contundentes en su contra, decidió colaborar con la justicia y confesar su participación en actividades delictivas, lo que permitió un acuerdo con la Fiscalía que significó también una rebaja en su condena.
Una vida criminal marcada por el poder y el terror
En sus declaraciones, Amparo Giraldo aceptó haber tenido un rol de liderazgo dentro de la organización armada, desde la cual supervisaba las operaciones de narcotráfico, extorsión y ejecuciones selectivas en la región.
Con un amplio esquema de seguridad compuesto por miembros armados, Giraldo se desplazaba con confianza entre las montañas de la Sierra Nevada y la ciudad de Santa Marta, negociando exportaciones de droga y dando órdenes directas para la eliminación de aquellos que consideraba una amenaza.
"Cuando algo no funcionaba correctamente, era ella quien daba la orden a los sicarios de Los Pachenca de matar, ya fuera a miembros del grupo que incumplían o a integrantes de otras organizaciones con las que disputaba el control de los corredores de narcotráfico", reveló uno de los investigadores judiciales a cargo del caso.
Junto a su pareja, Jonathan de Jesús Soto Quintero, alias ‘Peligro’, alias ‘Natalia’ controlaba las rentas ilegales de la región. Mientras ‘Peligro’ se encargaba principalmente de liderar las extorsiones, Giraldo gestionaba el tráfico de drogas y las relaciones con otros grupos criminales al servicio de las ACSN.
Captura y condena tras años de dominio
El reinado de Amparo Giraldo terminó en junio de 2019, cuando fue capturada durante un operativo realizado por el Ejército y el CTI de la Fiscalía en una de sus propiedades en el exclusivo sector de Pozos Colorados en Santa Marta.
Durante el allanamiento, las autoridades incautaron dos pistolas, municiones, más de 24 millones de pesos en efectivo, cinco teléfonos celulares y una camioneta Toyota blindada.
Alias ‘Peligro’, quien se encontraba con ella en el momento de la captura, también fue detenido.
Ambos fueron procesados por delitos como concierto para delinquir con fines de homicidio, extorsión, tráfico de estupefacientes y porte ilegal de armas.
Confesión y acuerdo con la justicia
Tras cinco años de proceso judicial, Giraldo decidió llegar a un preacuerdo con la Fiscalía, en el que aceptó su responsabilidad en múltiples crímenes, incluidos asesinatos ordenados como parte de una violenta lucha por el control de las rentas ilegales en la región.
La condena, validada por un juez penal, determina que Amparo del Carmen Giraldo Giraldo deberá cumplir su sentencia en un centro penitenciario.
Su confesión no solo detalla su involucramiento directo en actividades ilícitas, sino también el rol de mando que ejerció durante los años más oscuros de la organización criminal.
Con su caída, la justicia cierra un capítulo clave en la historia del crimen organizado en el Magdalena, aunque el impacto de su imperio delictivo aún se siente en la región, donde Los Pachenca continúan operando bajo otros mandos.
Roger Urieles
Para EL TIEMPO Santa Marta
En X: @rogeruv