Son muchas las personas que para empezar sus rutinas diarias beben una taza de café. Algunos lo hacen para despertar con más energía, otros porque sienten que es el “complemento perfecto” para sus desayunos.
Tomar café a primera hora del día podría potencializar los beneficios que tiene para prevenir las enfermedades cardiovasculares, diabetes e incluso podría aumentar su expectativa de vida.
Un trabajo de casi 20 años entre La Facultad de Medicina de Harvard y la Universidad de Tulane lo comprueba. La investigación analizó datos de más de 40.000 adultos en Estados Unidos, recopilados entre 1999 y 2018, mediante cuestionarios de salud. Estos incluían preguntas sobre la ingesta de café: si lo consumían, en qué cantidad y a qué hora del día.
Con esta información, crearon tres grupos de clasificación: los que no consumían café, los que lo tomaban en las mañanas y los que lo consumían durante el día. A partir de esto, analizaron los índices de mortalidad y lo relacionaron con la ingesta de café.
El consumo de café puede reducir la probabilidad de muerte prematura. Foto:iStock
Hallazgos significativos de tomar una taza de café
- Se observó que quienes bebían café por la mañana tenían un riesgo de muerte prematura de 16 por ciento en comparación con los que no lo consumían.
- En el grupo que consumía café a primera hora se identificó un 31 por ciento menor riesgo o probabilidad de fallecer.
- Al ajustar factores de riesgos como problemas de sueño, tabaquismo y colesterol alto, se mantuvo la asociación entre el consumo matutino de café y una menor mortalidad.
- Según los estudiosos, la hora de consumo sí influye sobre el organismo debido a los ritmos biológicos y a la respuesta inflamatoria del cuerpo.
Además, en un editorial relacionado, el profesor Thomas F. Luscher, destacó que el consumo de café por la mañana podría coincidir con un aumento natural de la actividad del sistema nervioso, lo que podría explicar los beneficios observados.
¿Cuántas tazas de café debe tomar para gozar de sus efectos?
Según el estudio de Harvard tanto un consumo moderado, es decir de 2 a 3 tazas al día, como uno más elevado estaban relacionados con un menor índice de mortalidad. Mientras que quienes bebían una taza o menos, experimentaban este beneficio pero en una escala más reducida.
En contraste, los investigadores añadieron que se necesitan más revisiones para comprender con precisión los mecanismos detrás de esta relación y si factores adicionales, como el estilo de vida de los consumidores matutinos de café, pueden cambiar los efectos.
La Clínica de Mayo, agrega que su hábito de café puede estar bien y presentar algunos beneficios, como los antes mencionados. Pero que si usted ya sabe que tiene efectos secundarios del café como acidez estomacal, nerviosismo o insomnio, debe considerar reducir su consumo.
MARIANA SIERRA ESCOBAR
EQUIPO ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO