Tenía dolor de rodilla, le amputaron una pierna y le enviaron analgésicos, pero en realidad tenía cáncer de huesos

hace 1 día 21

Alicia Ortstad, de Suecia, tenía un dolor persistente en la rodilla que resultó ser cáncer de huesos. Para poder salvar su vida y evitar que la enfermedad se propagara, le amputaron la pierna.

En el verano de 2023, cuando tenía 19 años, la joven comenzó a sentir una molestia en su rodilla izquierda. Al inicio, creyó que no era nada grave, pero con el tiempo, en agosto del mismo año, su pierna se hinchó y no podía soportar peso sobre ella.

Después de que los médicos le recomendaran inicialmente reposo y analgésicos, una resonancia magnética realizada en diciembre de 2023 reveló un tipo poco común y agresivo de osteosarcoma, un cáncer de huesos.

Los especialistas informaron que la amputación era la única forma de detener la progresión de la enfermedad. Con el apoyo de su novio, Simon Pettersson, de 21 años y también amputado debido a un osteosarcoma, Alicia se sometió a la amputación de su pierna en enero de 2024 y desde entonces utiliza una prótesis.

Las señales de que tenía cáncer que la joven ignoró

En la actualidad, la joven utiliza sus plataformas de redes sociales para informar a los demás sobre el cáncer de huesos. En repetidas ocasiones, ha advertido sobre las señales que ella ignoró para que los internautas puedan tenerlas en cuenta y tener una detección temprana.

"Ahora que miro hacia atrás, hay muchas señales que ignoré por completo y que ahora sé que eran indicaciones de que algo andaba mal conmigo", dijo Ortstad, en conversación con 'Daily Mail'.

De acuerdo con un video, publicado en TikTok, Alicia siempre se sentía cansada y fatigada, sin importar lo mucho que descansara. También, se enfermaba con frecuencia, tenía fiebre alta y faringitis estreptocócica a menudo.

Le costaba concentrarse en el colegio y tenía que tomar siestas en los descansos y durante sus clases. Tampoco podía beber alcohol, ni siquiera de forma moderada, sin sufrir de las peores resacas.

La joven reveló que también sufría mucho dolor cuando estaba descansando, cuando estaba activa no era tan fuerte: "El dolor comenzó leve y empeoró con el tiempo. Ningún analgésico, ni siquiera la morfina, funcionó. El dolor era peor por la noche y afectaba mi sueño".

Para finalizar, le comenzó a crecer el bulto en la rodilla que llevó a su diagnóstico de cáncer de huesos. La amputación fue la única solución para que la mujer pudiera ganar la batalla contra esta enfermedad.

"Estaba en estado de shock total y no creo que al principio haya procesado realmente la noticia de mi amputación. Estaba feliz de tener finalmente una respuesta y de librarme del dolor y del cáncer. Después de la amputación, fue un gran cambio; de repente, no tenía pierna", explicó.

Alicia reveló que la primera semana después de su amputación fue la peor, pues sentía dolor de miembro fantasma: "Eso fue lo peor, tener dolor constante en una extremidad que ya no está".