El fútbol argentino volvió a sacudirse este jueves, luego de que la asamblea de la Asociación del Fútbol Argentino reeligiera por “aclamación” al presidente de la entidad, Claudio ‘Chiqui’ Tapia, como presidente de la entidad para un periodo que irá hasta octubre de 2028.
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La decisión tiene además otras secuelas desde el punto de vista legal y significa todo un desafío a la Inspección General de Justicia y al gobierno de Javier Milei.
La asamblea “nombró al nuevo comité ejecutivo con Juan Román Riquelme como vicepresidente primero. Además, cumplió con las modificaciones estatutarias, mudó la razón social a la provincia de Buenos Aires y suspendió los descensos en la primera división”, reveló el diario La Nación.
Además, Tapia, en el cargo desde 2017, tendrá la posibilidad de aspirar a un periodo más: la asamblea aprobó que la cantidad máxima de mandatos de manera consecutiva pase de cuatro a cinco.
El tema, sin embargo, aún tiene un coletazo legal. “Tras las determinaciones del órgano supremo de la AFA, será ahora la cámara de Apelaciones en lo Civil de la Ciudad de Buenos Aires la que defina si lo aprobado en Ezeiza tiene validez o no. El fallo puede demorarse hasta un mes”, insistió La Nación.
La asamblea terminó con una ovación al presidente de la AFA. “Vení, vení... cantá conmigo... que un amigo vas a encontrar. Que de la mano de Chiqui Tapia, todos la vuelta vamos a dar”, se escuchó.
La decisión de anular los descensos en la primera división
Desde el punto de vista deportivo, la decisión más trascendental fue la anulación de los descensos. De esta manera, la próxima edición de la Liga volverá a tener 30 equipos y no 28, como este año, y subirán cuatro escuadras más desde la Primera Nacional.
“Independiente Rivadavia de Mendoza y Tigre, últimos en las tablas de promedios y de puntos, respectivamente, festejarán por adelantado que ya no tienen la amenaza de la pérdida de la categoría”, recalcó La Nación. Cabe recordar que en el primero juega el colombiano Sebastián Villa.
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