La vigésima octava edición del festival Rock al Parque finalizó tras un fin de semana marcado por la lluvia y una fanaticada que no perdió la oportunidad de ver a algunas de las mejores bandas de rock, metal, punk, ska y reggae en el ámbito nacional e internacional.
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Llovió desde la apertura del parque Simón Bolívar, a la 1 p. m., pero el festival se llenó de aficionados en carpas en los tres escenarios permanentes que tuvo Rock al Parque. Apenas entre el 9 y el 10 de noviembre asistieron 160.700 personas. Ayer esta gran fiesta musical estaba abarrotada de gente al ir terminando la tarde, los organizadores estiman que fueron más de 140.000 personas.
Este año el evento reunió a más de 750 músicos de 58 bandas: 20 distritales, 9 nacionales y 29 internacionales, de más de 12 países.
Los fieles al festival se movieron entre los escenarios, bares, restaurantes y mercados que había dentro de Rock al Parque, uno de los festivales gratuitos y al aire libre más grandes de Latinoamérica.
La cartelera del sábado privilegió como siempre a los seguidores del heavy metal. Se presentó la agrupación sueca Hypocrisy, que tiene más de 30 años de trayectoria. Después de unos primeros minutos con problemas técnicos, dieron un espectáculo de alto nivel sin interrupción.
También estuvieron la banda bogotana La Pestilencia, con un concierto enfocado en la paz y los derechos en Colombia, y el grupo alemán de metal Haggard, que mezcla música clásica y moderna. Asimismo, Testament cerró la primera noche con toda la intensidad que su vocalista, Chuck Billy, puede entregar al público.
En la tarde del domingo volvió a llover, pero los riffs de guitarra y la alegría de la audiencia pudieron conjurar el clima por un rato.
La mítica banda colombiana Kraken se apoderó del escenario con su vocalista Roxana Restrepo, llamada a encarnar una nueva generación del rock y quien cantó los clásicos del grupo rindiendo un homenaje a Elkin Ramírez (su anterior voz y líder) y presentando canciones de su más reciente disco Kraken VII: los pasos del titán.
Superlitio se presentó en simultáneo con los éxitos de su repertorio y Tweety González –productor de Soda Stereo– como invitado. Más tarde salió Doro, la ‘reina del metal’, que puso a temblar el parque Simón Bolívar con clásicos demoledores como 'Fight for Rock', 'All We Are' y hasta una versión de 'Breaking the Law', de Judas Priest, que fue coreada por sus fanáticos.
Último día: Nicolás y los fumadores, Doctor Krápula, Los Toreros Muertos y Mago de Oz
Si hay un grupo que encarnara de alguna manera la nueva generación del rock capitalino, ese es Nicolás y los Fumadores, que se presentó en la tarde de ayer ante una mayoría de público juvenil que los sigue después de debutar con el álbum Como pez en el hielo en el 2018.
Después de tocar 'La pálida' se presentaron a la audiencia del Escenario Bio: "Buenas noches, Rock al Parque. Al fin podemos decir eso de verdad y no en un bar de mala muerte. Ahora una canción para aquellos a los que les gusta el frío", y comenzó la canción 'El verano'.
'Y yo que me quejaba del frío bogotano hoy me estoy muriendo de verano...'
Pasaron a tocar su éxito 'Bailando triste' y una épica versión de homenaje a 'Vestido de cristal' de Kraken, en la que pidieron disculpas y entregaron su admiración al grupo fundado en Medellín por Elkin Ramírez.
Luego tocaron 'El túnel' y se despidieron de su primer Rock al Parque con una versión extendida de 'La brisa'.
El Escenario Plaza parecía lleno cuando se presentó Doctor Krápula a las 7:05 p. m. con 'Para todos todo'.
Los bogotanos no desaprovecharon la oportunidad para referirse a la polémica por la canción +57 de Karol G, Feid, Maluma, J Balvin, Ryan Castro y Blessd. "Si nosotros queremos dejar de ser vistos como el país del narcotráfico y el putero del mundo, pues no podemos estar haciendo canciones que hagan apología a narcotráfico y mucho menos a la pedofilia. La niñez es sagrada, gente", dijo el vocalista, Mario Muñoz.
Después se despacharon con canciones como 'Amanece', 'Arte es resistencia' y 'Exigimos'. Mientras tanto, la plaza se seguía llenando de gente y Doctor Krápula cerraba el 'show' con 'El pibe de mi barrio'.
A las 8:05 p. m. Pablo Carbonell comenzó a cantar: "Ya están aquí los toreros muertos. Ya están aquí... muertos, muertos".
Los españoles, afamados por sus éxitos ochenteros, salieron ante una plaza repleta que bailó y cantó sus letras más absurdas. "Sí. También me sorprende que nos sigamos ganando la vida con esto", dijo Carbonell después de cantar 'Bicicleta estática'.
Siguieron con clásicos como 'Pilar', 'Yo no me llamo Javier', 'Hoy es domingo' y 'Mi agüita amarilla'. Además, los madrileños aprovecharon la víspera de sus 40 años de trayectoria para cantar su primer sencillo 'El fútbol femenino'.
El cierre del festival estuvo a cargo de Mago de Oz, que salió a las 9:14 p. m. con canciones de su nuevo álbum 'Alicia en el metalVerso'
La voz de Rafa Blas, cantante de Mago de Oz desde 2023, puso a vibrar a toda la plaza con 'La posada de los muertos', que desató algunos 'pogos' sobre la marea de público que se recogía entre las tribunas del parque Simón Bolívar.
El grupo madrileño hizo un recorrido por sus éxitos históricos y tuvo tiempo de rendirle homenaje a la 'Marcha turca' de Amadeus Mozart en guitarra eléctrica.
Acompañaron los clásicos como 'Molinos de viento' con canciones actuales y el público no paró de saltar y grabar durante todo el concierto. Blas aprovechó para homenajear a Elkin Ramírez por toda su carrera y despidió al Rock al Parque 2024 con la épica 'Fiesta pagana' que nadie se quiso perder.
JUAN JOSÉ RÍOS ARBELÁEZ
Escuela de Periodismo Multimedia EL TIEMPO