En las últimas semanas ha crecido el comentario entre los habitantes de una población del suroriente del Valle del Cauca sobre los robos de equipos indispensables para la salud.
Una de las hipótesis es que se esté dotando un consultorio o clínica con esos elementos hurtados en el hospital de Candelaria, en un barrio y un corregimiento de este municipio a unos 30 minutos de Cali.
En enero, en el sector de Poblado Campestre, se llevaronn dos equipos portátiles, dos glucómetros y un doppler fetal, que permite ver el flujo sanguíneo de las arterias cerebrales del feto.
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La Empresa de Salud del Estado (ESE) Hospital de Candelaria informó que se robaron un monitor fetal y una impresora del ecógrafo en febrero.

La gerente del Hospital de Candelaria (Valle), Adriana Zapata,
Foto:
Hospital Local de Candelaria
La gerente del Hospital, Adriana Zapata, dice que la preocupación es que se estén cometiendo robos por 'encargo' y se afecte a los pobladores del municipio.
En marzo llegaron hasta Villagorgona por un ecógrafo portátil e impresora.
Esos elementos son para prestación del servicio a la comunidad.
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Autoridades pidieron que no se compren equipos robados porque se afecta a los candelareños.
El reporte de los casos fue entregado al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima).
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Los equipos tienen una marca y un registro de esa entidad, de modo que su operación quedaría bajo la ilegalidad y se limita su venta.
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