El Puente Pumarejo, una de las infraestructuras más importantes del Caribe, lleva más de 10 meses sin iluminación en gran parte de su estructura.
La falta de alumbrado en la obra, que costó más de $785.000 millones, preocupa a la comunidad del suroriente de Barranquilla, que teme por la inseguridad en la zona. Aunque los ciudadanos exigen una solución inmediata, las entidades responsables no han logrado resolver el problema.
Responsabilidad compartida
El Instituto Nacional de Vías (Invías) ha señalado que el mantenimiento del alumbrado público en el puente es responsabilidad del Distrito de Barranquilla y el municipio de Sitionuevo, Magdalena.
Puente Pumarejo Foto:Vanexa Romero/EL TIEMPO
Sin embargo, Sitionuevo enfrenta dificultades económicas que le impiden asumir los costos del servicio. Según Invías, el municipio tiene una deuda de $650 millones con la empresa de energía Air-e, lo que complica aún más la posibilidad de financiar la iluminación.
Wilson Mancilla, presidente de la veeduría ciudadana del puente Pumarejo, explicó que la solución pasa por la compra e instalación de un transformador valorado en $50 millones.
"Ni la Gobernación del Magdalena ni Invías han adelantado los trámites para adquirirlo", afirmó. Mientras tanto, la estructura sigue parcialmente a oscuras, generando preocupación entre los usuarios.
Barranquilla, Colombia, 26 de Julio de 2024. Puente Pumarejo. Alrededores, carrera 9. Foto: Vanexa Romero/El Tiempo. Foto:Vanexa Romero/ El Tiempo
Antecedentes del problema
La falta de iluminación no es un problema nuevo. Hace dos años, desconocidos hurtaron las lámparas del puente, dejando a toda la estructura sin luz. En ese momento, Invías logró restablecer el servicio, pero la situación se repitió, sin que hasta ahora se haya encontrado una solución definitiva.
Para prevenir nuevos robos, Invías contrató una empresa de vigilancia y gestionó la instalación de cámaras de seguridad. No obstante, Mancilla señala que la presencia de guardias es insuficiente y no ha evitado que el puente vuelva a quedar a oscuras.
A pesar de los reclamos ciudadanos y el riesgo de inseguridad, la falta de un acuerdo entre las entidades responsables mantiene en vilo a los habitantes de Barranquilla y Sitionuevo.
A lo largo de la estructura, se logra apreciar en este estado el cableado. Foto:Vanexa Romero /EL TIEMPO
Falta de respuesta oficial
La comunidad insiste en que se destinen recursos para la compra del transformador y se restablezca el servicio de iluminación. Sin embargo, hasta el momento, ninguna entidad ha asumido la responsabilidad de financiar la instalación.
Mientras tanto, los ciudadanos siguen esperando una solución definitiva que garantice la seguridad y el adecuado funcionamiento de esta obra clave para la conectividad entre Atlántico y Magdalena.
El Puente Pumarejo, construido por la firma Sacyr y cuya interventoría estuvo a cargo de Mab Ingeniería Valor, permite el paso de buques de hasta 45 metros de altura. Aunque se han invertido millonarios recursos en su construcción, la falta de luz en gran parte de su estructura evidencia problemas de gestión y mantenimiento que aún no se han resuelto.