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hace 1 mes
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La región Caribe colombiana no es ajena a la problemática de reclutamiento de menores, por parte de los grupos armados ilegales.
Conforme a los criterios de
Además, en los últimos meses, varias zonas del país se han visto afectadas por la presencia de grupos armados ilegales y grupos organizados que han causado una afectación generalizada en la población civil.
Eventos que, en el 2023, se han sostenido y han presentado un aumento considerable, según varios observatorios, agencias humanitarias, centros de análisis (FIP, HRW, MOE, OCHA) y las 61 Alertas Tempranas emitidas por la Defensoría del Pueblo desde 2022.
La niñez ha sido una de las poblaciones más afectadas, especialmente por el reclutamiento forzado.
De acuerdo con la Coalición contra la Vinculación de Niños, Niñas y Jóvenes al Conflicto Armado en Colombia, se registraron 151 casos de reclutamiento de menores de edad por parte de estos grupos armados ilegales.
Indagando con instituciones policiales y militares, y Defensoría del Pueblo en jurisdicción del Atlántico, estas no reportan casos oficiales de reclutamiento de menores por parte de grupos al margen de la ley.
Así analiza un experto el panorama en la ciudad
Ha sido cada vez más común que se capturen a menores de edad participando en actividades delictiva
Hay que recordar que en este departamento operan el Clan del Golfo y bandas locales, como Los Costeños, Los Rastrojos Costeños y Los Pepes, señaladas por las autoridades por los delitos de extorsión, homicidios y presuntos vínculos con el narcotráfico.
En diálogo con EL TIEMPO, el docente e investigador, Luis Fernando Trejos, asegura que, si bien no hay un registro oficial, las organizaciones sociales, especialmente del sur del Atlántico, han denunciado el reclutamiento.
“Ha sido cada vez más común que se capturen a menores de edad participando en actividades delictivas, vinculados a grupos delincuenciales organizados. No tanto cumpliendo funciones de sicariato, pero sí cobrando extorsión y sirviendo de ‘puntos’ en algunos lugares”, manifestó el analista experto en materia de conflicto armado.
Estrategias con redes comunitarias
Debido a estos episodios de violencia que se han presentado en varias zonas del país en los últimos meses, en el marco del mes de la paz, World Vision realizó diferentes iniciativas y actividades en algunas ciudades y municipios del país para fomentar la paz y la convivencia en la comunidad.
El diseño de la Guacamaya como ícono de la campaña.
Foto:World Vision
Durante los diferentes encuentros, las niñas, niños y jóvenes identificaron sus necesidades prioritarias y realizaron diferentes acciones de participación, movilización, incidencia y colaboración en compañía de redes comunitarias y otras organizaciones del sector público, educativo y local.
En Barranquilla y Soledad, en el Atlántico, la organización se centró en promover acciones colectivas con el lema ‘En paz con el ambiente decimos suficiente’.
En esta actividad, se contó con la participación de niñas, niños, adolescentes y líderes comunitarios que fueron convocados para reflexionar sobre la relación entre la humanidad y la naturaleza.
Igualmente, en Barranquilla, se hizo un conversatorio inaugural que reunió a 100 participantes, los cuales crearon un símbolo de la campaña representado por el ave guacamaya, un ícono de libertad y armonía con el medio ambiente.
La campaña en otras ciudades del país
En Montería, la organización reunió a 563 personas para participar en conversatorios, foros y muestras artísticas que fomentan el diálogo y la reflexión crítica sobre la construcción de una cultura de paz.
Las actividades permitirán a los jóvenes expresar su visión de la paz a través del arte, promoviendo la cohesión social en la comunidad.
En Medellín, se llevó a cabo una movilización que contó con espacios de reflexión en tres instituciones educativas, donde realizaron actividades que tuvieron como objetivo promover la construcción de paz y la sana convivencia en un entorno escolar que enfrentan diversas formas de violencia.
Campaña de paz en Barranquilla.
Foto:World Vision
“Estas acciones son necesarias para abordar la violencia en el entorno escolar de una forma creativa y atractiva para los jóvenes, así se tiene una amplia participación y no se entiende como actividad sin un verdadero trasfondo", dijo Laura Agudelo, quien hace parte del staff de World Vision.
Según la organización, estos eventos resaltan el compromiso de la organización y las comunidades participantes en construir entornos pacíficos y respetuosos, donde se fortalezca el diálogo, se sensibilice la paz y se promuevan expresiones artísticas para la paz.
“Con la participación que generamos de niñas, niños y adolescentes, seguimos trabajando para que ellas y ellos sean protagonistas en la transformación social que requieren las comunidades más vulnerables del país, donde la construcción de la paz sea un objetivo en común”, afirmó Fedra Rubio, gerente de Alianzas Estratégicas y Advocacy.
Deivis López Ortega
Corresponsal de EL TIEMPO
Barranquilla
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