¿Por qué la posible llegada de Marco Rubio a la secretaría de Estado de EE.UU. sería un problema para el gobierno del presidente Gustavo Petro?

hace 1 semana 26

De acuerdo con medios estadounidenses, el senador republicano Marco Rubio se perfila como uno de los fuertes candidatos a ocupar el cargo de secretario de Estado de Estados Unidos en la segunda presidencia de Donald Trump. De concretarse esa designación el gobierno del presidente Gustavo Petro tendría que prepararse para un escenario turbulento en las relaciones diplomáticas.

Conforme a los criterios de

Desde 2011, Rubio, cubano-americano de 53 años, ha consolidado una posición importante como senador republicano representando a la Florida convirtiéndose en una de las voces más fuertes en contra de los regímenes de Cuba, Nicaragua y Venezuela. Al ser senador por la Florida, su base electoral está, precisamente, en aquellos ciudadanos de estos países (tradicionalmente, los cubanos) que han huido de estos países por razones políticas o económicas.

Trump y Marco Rubio

Trump y Marco Rubio

Foto:AFP

En 2016, de hecho, estuvo entre los candidatos que disputó la nominación republicana para las elecciones de ese año y que terminó ganando Trump. Para este nuevo mandato, el nombre de Rubio llegó a ubicarse entre los posibles vicepresidentes del país norteamericano.

De clasificar como secretario de Estado, Rubio podría, como suele hacer quien ocupa este cargo, el más importante en cuanto a las relaciones internacionales de los Estados Unidos, asesorar a Trump con respecto a asuntos de interés internacional e implementar las decisiones de política exterior. Esto quiere decir que, muy seguramente, Estados Unidos subiría el tono contra el actual gobierno de Colombia.

Rubio ha sido crítico del presidente Petro y ha arremetido contra él en varias ocasiones. En octubre de 2023, tras el estallido de la guerra en Gaza, llamó al mandatario colombiano un "portavoz de asesinos y criminales" por no condenar ataques en los que han muertos cientos de civiles israelíes por parte de Hamás. 

Presidente Gustavo Petro.

Presidente Gustavo Petro.

Foto:Presidencia

En noviembre de ese mismo año, en entrevista con EL TIEMPO, el senador aseguró que "fue un error" la invitación a Petro a la Casa Blanca por parte de la administración de Joe Biden. Y luego, en mayo de 2024, arremetió contra el jefe de Estado en una columna escrita en este diario asegurando que pone en "riesgo" dos décadas de progreso en Colombia y que los problemas de la política de 'paz total' demuestran que "no se le podía confiar el poder".

"Yo creo que dificultaría la relación en la medida en que Marco Rubio, por sus intervenciones en público y el Senado, es una ala radical hacia la derecha con una agenda política clara en contra de ciertos regímenes políticos en América Latina y principalmente ha sido un crítico fuerte del gobierno Petro", comenta Manuel Alejandro Rayran, docente e investigador de la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia.

Recursos y Venezuela, los puntos delicados

Según Rayran, con Rubio en el Departamento de Estado habría que ver qué sucede con el apoyo económico de Estados Unidos a Colombia. Si bien es el Congreso el que tiene el poder financiero de la política exterior estadounidense y la salida de Rubio supondría una perdida para el partido republicano en el legislativo, igualmente podría influir en un Senado será republicano y una Cámara que está en camino de serlo (aunque faltan aún algunos escaños por definir).

"Podría perjudicar en temas de ayuda hacia la guerra contra las drogas y otros temas. No hay que olvidar que el Senado quedó para los republicanos y parece también que en la Cámara va pasando. Eso también puede llevar a ralentizar o demorar los procesos de debate para la aprobación del dinero de apoyo hacia Colombia", dice Rayran.

Por otro lado, para Eduardo Velosa, director de la Maestría en Estudios Internacionales de la Javeriana, el gobierno Petro se podría ver más presionado en su postura sobre el presunto fraude de Nicolás Maduro en Venezuela, encontrando así más obstáculos en su rol de mediador de la crisis.

Nicolás Maduro en la cumbre de los Brics.

Nicolás Maduro en la cumbre de los Brics.

Foto:AFP

"Si bien yo no podría decir que el gobierno Petro es un aliado incondicional de estos regímenes, sus actuaciones sí han protegido a estos regímenes, por ejemplo, la votación contra Nicaragua en la OEA en agosto de 2022, la no condena de los resultados electorales en Venezuela, y la no condena al régimen cubano, a pesar del consenso en solicitar el levantamiento del bloqueo por parte de Estados Unidos".

Así las cosas, dice, Estados Unidos, con Trump y Rubio, le exigirían al gobierno colombiano una posición más dura frente al régimen venezolano.

De hecho, agrega Rayran que la propuesta de Petro de levantar los bloqueos a Venezuela podría quedar al borde del abismo. "Esa propuesta quedaría sepultada", comenta.

¿Murillo, un hombre clave que podría no estar para manejar la relación con Rubio?

Luis Gilberto Murillo, canciller de Colombia, en debate de control político en el Senado.

Luis Gilberto Murillo, canciller de Colombia, en debate de control político en el Senado.

Foto:César Melgarejo. EL TIEMPO

Ante este panorama, la figura del canciller Luis Gilberto Murillo, de buenas referencias y contactos en los Estados Unidos, podría ser clave para darle manejo a la relación con Rubio. Sin embargo, todavía no es claro qué sucederá con el jefe de la diplomacia colombiana el próximo año cuando arranque la cuenta regresiva para las renuncias por aspiraciones electorales para el 2026. Si bien Murillo no ha confirmado una aspiración presidencial, tampoco la ha descartado.

"Murillo podría tramitar de mejor manera esta relación con el gobierno Trump y Marco Rubio. También dependería de cómo se mueva el embajador en Washington. Aunque habrá que esperar si el canciller se sostiene en su cargo. En caso de que aspire a la Presidencia, Gustavo Petro tendrá que ser muy cuidadoso de cara a quién estaría en la Cancillería para tratar esta relación con delicadeza", sostiene Rayran. 

Tras la victoria de Trump, Murillo señaló que ambos países deben hacer énfasis en los temas que los unen. "El diálogo entre el sur global y el norte global sobre temas centrales de supervivencia de la humanidad y de salvamento del planeta tienen que continuar. Y además de eso, en la necesidad de encontrar puntos comunes para la prosperidad de nuestros pueblos. Aquí hay que hacer más énfasis en lo que nos une, que debe ser lo más importante, que realmente en lo que nos separa", dijo.

JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ

Periodista de Política

Leer Todo el Artículo