A la reforma laboral todavía le quedan dos duras batallas por enfrentar. Primero, deberá medirse a la plenaria del Senado, donde se anticipa un fuerte pulso alrededor de un par de artículos. Luego, si es aprobada, se vendrá la conciliación, donde estarán puestos todos los reflectores, pues existen serios riesgos de que en este trámite el proyecto se hunda por falta de voluntad política del Gobierno y sus fuerzas, que son mayoría en la Cámara.
La discusión del martes en la Comisión IV del Senado, donde la iniciativa fue aprobada en su tercer debate tras su resurrección, dejó en evidencia que, si bien primó el consenso, hay unos puntos sensibles que generarán controversia en el cuarto y último debate.
Así fue el debate de la reforma laboral en la Comisión Cuarta del Senado. Foto:Néstor Gómez. El Tiempo
De entrada, se prevé que haya un amplio consenso en el grueso del articulado, el cual se dialogará entre el grupo de ponentes, que tiene representantes de prácticamente todas las fuerzas con curul en el Senado, para agilizar la discusión y así poder dedicar más tiempo a los temas sensibles.
Uno de ellos es sobre recargo nocturno. En la ponencia de cara a la discusión en la célula legislativa que dirige Angélica Lozano, de Alianza Verde, se establecía que este sería desde las 7 de la noche, pero estarían excluidas las pequeñas empresas. Sin embargo, con 8 votos a favor y 7 en contra, se decidió que ese pago adicional será para todas las empresas.
Las fuerzas de la plenaria estarán divididas. Desde el Centro Democrático, que tiene 13 votos, anticiparon que buscarán establecer esas excepciones, ya que se estaría golpeando a la base de la economía y habría serios riesgos para la formalidad.
Carlos Meisel, senador del Centro Democrático Foto:Néstor Gómez. EL TIEMPO
“Esto, así como está, con los micros y pequeños, es muy difícil acompañar. No acompañar este tema es no acompañar la reforma. Hay que esperar, pero si nosotros sentimos el mismo atropello con la micro y pequeña empresa, es muy difícil que podamos coincidir”, aseguró el senador Carlos Meisel, del uribismo, en diálogo con este diario. El parlamentario insistió en que se siente traicionado porque el acuerdo inicial para el tercer debate establecía que ese recargo iba con excepciones.
Conservadores, Cambio Radical y una parte de ‘la U’ también insistirían en que el recargo nocturno debe ser con excepciones, ya que no todas las empresas están en condiciones de asumir ese costo.
“Me dolió mucho lo de las microempresas, me dolió que eliminaran en la Comisión IV unos beneficios para las microempresas. Esa sí es la economía popular, eso sí son las famiempresas que luchan día a día y que muchos no tienen empleos estables, sino que están en la informalidad. Vamos a insistir en el tema de las microempresas, en la economía popular, en la gente de abajo. Si queremos defender al pueblo, hay que aprobar esa excepción. Se ha señalado que se destruirán 450.000 empleos, se ha señalado que la informalidad subirá alrededor del 12 por ciento. Los que pagan son, precisamente, los más pobres de la economía popular. Tenemos que respaldarlos en la plenaria”, dijo el senador conservador Efraín Cepeda, presidente del Congreso.
El presidente del Senado, Efraín Cepeda, defendió la decisión de hundir la consulta popular. Foto:Senado
Una de las grandes incógnitas es la posición que tomarán el Pacto Histórico y los aliados del Gobierno. El Ejecutivo no le ha hecho mayor fuerza a esta reforma tras su resurrección y han insistido en la consulta popular, aunque, tras ver el resultado de este martes, terminaron celebrando el avance.
“Gran noticia para las trabajadoras y los trabajadores de Colombia con nuestra Reforma Laboral aprobada en la Comisión Cuarta del Senado”, aseveró el ministro del Interior, Armando Benedetti.
Y es que sería un mensaje contradictorio de la Casa de Nariño no acompañar la propuesta. Tanto así que, contrario a lo que dicen desde el Pacto Histórico y el propio presidente Gustavo Petro, quien acusa a Lozano de haberle entregado el proyecto a la extrema derecha, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, reconoció que el texto contiene la esencia de lo presentado por el Gobierno.
Cartel en contra de la reforma laboral Foto:Néstor Gómez. EL TIEMPO
“Por ahora hemos neutralizado la ‘peluqueada’ total a la reforma laboral en la Comisión 4 del Senado. Ganamos asuntos sustanciales como la jornada laboral hasta las 7 p. m., los recargos nocturnos, dominicales y festivos sin restricciones; pero quedan batallas importantes en la plenaria del Senado y la conciliación, como el contrato laboral de los aprendices del SENA y similares, o la prohibición de la intermediación y precarización laboral a través del perverso contrato sindical. A no bajar la guardia. El seguro de vida de las reformas sigue siendo la Consulta Popular”, opinó el jefe de la cartera de Trabajo.
Las alertas por posible archivo en la conciliación
Pero más allá de estos puntos, hay un ambiente de concertación. El Congreso, al negar la consulta popular, quedó empeñado en sacar adelante una reforma laboral que beneficie a los trabajadores y mejore sus condiciones.
El presidente Gustavo Petro en el Consejo de ministros de este martes. Foto:Presidencia
Sin embargo, todas las alertas están prendidas respecto a lo que suceda en la conciliación. El presidente Petro advirtió que, en ese trámite, insistirán en lo aprobado en la Cámara de Representantes y no en lo que se ha conciliado en el Senado.
Por eso, se corre el riesgo —y las alarmas están prendidas— de que no se surta con éxito ese último trámite, teniendo en cuenta que en la Cámara el Ejecutivo tiene las mayorías, y Jaime Raúl Salamanca, presidente de esa corporación, es aliado del presidente Petro.
“Va a ser una conciliación intensa. Hago un llamado al Gobierno Nacional para que sea serio, porque hasta ahora lo que muestra es que quiere política, campaña, consulta con dineros públicos y no una reforma laboral justa. Siguen mintiendo y difamando”, aseveró Lozano, quien en días pasados le dijo a este diario que no ve a Salamanca prestándose para sabotear ese último paso antes de que la reforma se convierta en ley.
Así está el calendario para la reforma laboral
Al tratarse de su segunda legislatura desde su radicación, la reforma laboral debe estar aprobada y conciliada antes del 20 de junio o se hundirá por falta de trámite.
Lo que viene para la reforma laboral. Foto:
Solo hasta el siguiente miércoles podrán comenzar a trabajar en la nueva ponencia, y se espera que, a más tardar, el miércoles 11 de junio esté aprobada en cuarto debate.
En plenaria, el debate podría llevar un ritmo similar al de comisión, por lo que serían hasta dos días de discusión. Bajo este panorama, lo ideal sería tener la conciliación a más tardar el 16 de junio para así evitar votar una conciliación a última hora y correr el riesgo de que se hunda estando a un paso de su aprobación.
MATEO GARCÍA
Subeditor de Política