La mantequilla es un alimento que no suele ser recomendado por nutricionistas y especialistas, porque puede poner en riesgo la salud si se consume en exceso debido a sus altos niveles de grasas saturadas y calorías.
A pesar de esto, se ha vuelto a viralizar su uso en los últimos meses. Son muchas las recetas en las que explican cómo añadir fácilmente el producto e incluso se encuentra como aperitivo en los restaurantes.
En la actualidad existen personas que consumen las barras del producto a bocados. Aunque para muchos parezca demasiado extraño, este hábito se ha convertido en una tendencia fuerte en las redes sociales.
Ya sea a mordidas o combinando el alimento con otras comidas, pero el ‘trend’ consiste en ingerir grandes cantidades de mantequilla sin importar la manera en la que se haga. Algunos de los creadores de contenido que han hecho este tipo de videos, han llegado a defender los ‘beneficios’ que tiene realizar esta práctica en el cuerpo.
Los influenciadores de la mantequilla, participaron también de la tendencia de la taza de café llamada ‘bulletproof coffee’, en la que se recomendaba disolver un gran trozo del producto dentro de la bebida, con la finalidad de acelerar el metabolismo y provocar saciedad.
Ante este tipo de ‘trends’ virales en internet, Ylenia López Llata, dietista y nutricionista, opina que “la mantequilla es un alimento con un alto porcentaje de ácidos grasos y, por tanto, bastante calórica, y el abuso de grasas saturadas, presentes en este alimento, no son muy beneficiosas para nuestro sistema cardiovascular”.
A pesar de que al consumir este alimento se pueden adquirir calcio y vitaminas liposolubles como las A, D, E y K, son componentes que se pueden encontrar también en otros alimentos menos riesgos para la salud.
Yessica Gutierrez, dietista y nutricionista, asegura que sí bien el consumo moderado de la mantequilla no es tan malo como muchas personas podrían pensar, al ser un producto presente de manera excesiva dentro de la dieta podría elevar los niveles de colesterol malo, que puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
Es por esto que resulta esencial aprender a controlar la cantidad de mantequilla que se ingiere a diario y establecer su consumo dentro de una dieta balanceada que contenga más alimentos y le brinde al cuerpo todos los nutrientes necesarios para un correcto funcionamiento del mismo.
ERIKA LUCIA IBAÑEZ GARCIA
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO