En el marco de la Cumbre de Petróleo y Gas, la firma Jaime Arteaga y Asociados presentó los resultados de la sexta edición del Barómetro Petrolero, un estudio que desde el 2019 monitorea cómo han evolucionado las percepciones, preocupaciones y expectativas sobre la industria de petróleo y gas.
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El Centro Nacional de Consultoría fue la encargada de encuestar a más de 3.350 ciudadanos, funcionarios de gobierno y directivos de las empresas sobre la percepción que tienen de este sector.
Según la encuesta del Barómetro Petrolero, el 80 por ciento de los colombianos cree que la industria petrolera es positiva para Colombia. Hubo una leve disminución frente al 81 por ciento que se registró hace un año.
La misma tendencia se presentó en las personas que consideran que la industria del petróleo y gas es positiva para su municipio, pasando de 83 por ciento en 2023 a 81 por ciento este año.
No obstante, el 83 por ciento de las personas que viven en municipios productores de hidrocarburos aseguran que la industria petrolera sí es positiva para el país y un 87 por ciento dice que lo es para su municipio.
Adicionalmente, mientras que en 2019 el 52 por ciento de los habitantes de las regiones productoras estaba de acuerdo con que se llevaran a cabo actividades petroleras en su municipio, este año el porcentaje llegó a ser de 70 por ciento.
En el total nacional, el apoyo pasó del 42 al 57 por ciento en este mismo periodo de cinco años, con una disminución de dos puntos porcentuales frente al dato de 59 por ciento del 2023.
El Barómetro Petrolero también reveló que la percepción positiva sobre las empresas de petróleo y gas también ha alcanzado su punto más alto en estos años: el 68 por ciento de los colombianos tiene una imagen favorable de las compañías petroleras. En las regiones productoras, este porcentaje asciende al 72 por ciento.
Además, el 78 por ciento dice que la industria de petróleo y gas genera desarrollo y oportunidades económicas para las comunidades donde opera, mientras que un 74 por ciento piensa que este sector puede convivir con otras actividades económicas como el turismo y el agro.
Igualmente, en los últimos años ha mejorado la percepción de transparencia de las regalías. Mientras que hace cuatro años el 43 por ciento de los colombianos creía que los recursos de las regalías que genera la industria de petróleo y gas se iban para corrupción, este porcentaje ha bajado de manera continua hasta ser el 32 por ciento en el 2024.
En cuanto a las entidades del Gobierno Nacional, las personas que participaron en la encuesta, y que viven en municipios productores, aseguraron que la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) es la que menos confianza les genera, con un 20 por ciento.
Otras autoridades que menos confianza les genera son el Ministerio de Minas y Energía (40 por ciento), la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (43 por ciento) y las Corporaciones Autónomas Regionales (43 por ciento).
Entre tanto, el 54 por ciento de los encuestados señalaron que el Ministerio de Medio Ambiente les genera confianza, el 53 por ciento dijo que los gremios empresariales y el 49 por ciento, las empresas petroleras.
Otro tema sobre el que consultó el Barómetro Petrolero fue la transición energética. Los resultados revelaron que seis de cada 10 personas saben qué es y el 95 por ciento dice que la transición energética requiere de tiempo para que se haga de manera de justa en el país.
Además, el 93 por ciento considera que los países más desarrollados deberían asumir los costos de la descarbonización en proporción con su contribución a las emisiones de gases, y el 70 por ciento aseguró que se puede luchar contra el cambio climático sin reducir drásticamente las operaciones de petróleo y gas.
En cuanto a la percepción que tienen los directivos del sector petrolero, solo el 22 por ciento dijo estar satisfecho con la comunicación de las empresas con el Estado. No obstante, hubo una mejoría frente al 15 por ciento reportado en 2023.
El alto respaldo de la opinión pública y la curva de aprendizaje del Gobierno dan razones para ser optimistas
Igualmente, aumentó marginalmente el porcentaje de directivos que dice estar satisfecho con el apoyo del Gobierno Nacional a la actividad de petróleo y gas: pasó del 3 por ciento en 2023 a un 14 por ciento en 2024.
Sumado a esto, cuatro de cada diez empresas señalaron que van a mantener sus operaciones en Colombia durante los próximos cinco años, si se mantienen las condiciones actuales, mientras que se mantuvo en un 17 por ciento las que esperan expandirlas.
Además, disminuyó a 43 por ciento (antes 49 por ciento) el porcentaje de compañías que tienen la intención de reducir sus operaciones, siendo la principal razón la falta de apoyo del Gobierno Nacional (24 por ciento).
También influyen las políticas del Gobierno Nacional, la falta de estabilidad jurídica, los problemas de seguridad, el rechazo de las comunidades a la industria petrolera en Colombia, mejores oportunidades en otros países, dificultades para obtener las licencias ambientales, la incertidumbre tributaria y los bajos precios del petróleo.
"Aunque es comprensible la preocupación por parte de las empresas, el alto respaldo de la opinión pública y la curva de aprendizaje del Gobierno dan razones para ser optimistas sobre el futuro de la industria del petróleo y gas en el mediano y largo plazo", destacó Jaime Arteaga, director del Barómetro Petrolero.
Además, manifestó que el reto de los líderes de las empresas está en basar sus decisiones no con base en la coyuntura actual, sino con la mirada hacia adelante para una industria que tiene todavía mucho que aportar al desarrollo del país.
De acuerdo con los directivos petroleros, la conflictividad social sigue siendo una variable muy crítica para los proyectos. El 73 por ciento afirmó que en el último año han enfrentado bloqueos de carreteras y de vías de comunicación.
Entre tanto, el 63 por ciento dice haber enfrentado marchas y manifestaciones, y un 60 por ciento manifestó haber tenido paros y huelgas de trabajadores en los últimos 12 meses.
El Barómetro Petrolero también resaltó que el 52 por ciento de los funcionarios del Gobierno dicen estar satisfechos con el cumplimiento de las reglas por parte de las empresas de petróleo y gas. Este es el porcentaje más alto desde que se realiza el estudio.
Así mismo, el 56 por ciento de los funcionarios del Gobierno creen que en el último año se ha avanzado en capacidad técnica y conocimiento sobre la industria petrolera de los responsables de las políticas públicas.