En los últimos días, se conoció la historia de una mujer que fue despedida de una empresa en Ginebra, Suiza. Su odisea comenzó el día que se reincorporó, tras terminar la licencia de maternidad, pues cuando llegó a su puesto de trabajo su lugar estaba desocupado.
Tras presentarse en el lugar de trabajo y encontrar su puesto vacío, recibió la notificación de despido, donde la empresa le indicaba una presunta “ruptura del vínculo de confianza”, alegando errores en el registro de sus horarios de trabajo.
Muchas mujeres son despedidas injustificadamente durante su etapa gestante. Foto:iStock
La trabajadora aseguró estar convencida de que su despido ocurrió por la licencia de maternidad, por lo que llevó el caso a un tribunal laboral, denunciando a la empresa por desacato a la Ley Federal de Igualdad entre Mujeres y Hombres, que prohíbe y sanciona la discriminación laboral basada en el sexo o el embarazo.
Tras la denuncia, la empresa alegó que el despido se dio por una presunta falsificación en los horarios de trabajo por parte de la mujer, indicando que de esta forma ella ‘había roto la confianza’, modificando los registros de entrada y salida.
El diario europeo ‘20 Minutos’ indica que el empleador, registró los ingresos y salidas de la mujer en un periodo de seis meses, donde se había “robado un total de ocho horas y cincuenta minutos” de trabajo.
Como defensa, la mujer alegó que pudo haber cometido errores en los registros de ingresos y salida de la empresa, pero esto no fue de manera intencionada y aseguró que nunca le habían advertido sobre esto, destacando que antes de su embarazo había recibido ascensos, bonificaciones y aumentos salariales.
Ante lo ocurrido y la versión de las partes, el Tribunal Laboral dictaminó que el despido era improcedente, e indicó que el problema podría haberse solucionado reasignando la tarea de registrar horarios de ingresos y salida.
Muchas mujeres son despedidas injustificadamente durante su etapa gestante. Foto:iStock
Además, los encargados de la investigación no pudieron comprobar que el despido estuviera relacionado con la licencia de maternidad, pero sentenció a la empresa a pagarle una indemnización de 15.000 francos suizos, que corresponden aproximadamente a 70 millones de pesos colombianos.
La empresa se negó a pegar lo ordenado por el tribunal laboral y apeló la decisión, pero esta se volvió en su contra y luego de una segunda revisión decidió que el despido era discriminatorio, por lo que ordenó pagar una segunda indemnización de 35.000 francos suizos, aproximadamente 160 millones de pesos colombianos.
ALEJANDRA HERNÁNDEZ TORRES
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO