Millonarios y Nacional se conformaron con un empate sin goles, pocas emociones y trabajo para los médicos

La fiesta en el clásico entre Millonarios y Nacional estuvo más en las tribunas, en las afueras del estadio y en los hoteles de concentración. El partido no resultó tan atractivo. Los dos equipos parecieron arreglar por las buenas y se conformaron con un empate sin goles que los deja bien ubicados en la tabla de posiciones de la Liga BetPlay.

Millonarios se acuesta a dormir este domingo como líder, con los mismos puntos de Junior y uno más que el ilustre visitante que pasó por El Campín dosificando el aire que le quedaba tras una semana durísima. 

El primer tiempo de Millonarios vs. Nacional, sin remates al arco

Nadie se quiere perder un partido de estos y por eso Nacional apeló a su mejor nómina, pese a que apenas 72 horas antes estaba en Porto Alegre, donde sufrió una dolorosa derrota en la Copa Libertadores contra Internacional. 

Del lado azul, el DT David González decidió darle continuidad a la nómina base de los jóvenes, que pusieron muchísimo entusiasmo, pero que tuvieron poca puntería, al menos en la primera etapa: de los siete remates azules, ninguno exigió al portero David Ospina. 

El juego no tuvo nada de clásico y tal vez fue el primer tiempo más lento de los últimos enfrentamientos entre azules y verdes. Nacional pagó el esfuerzo del largo viaje desde Brasil y no se vio tan brillante como en ocasiones anteriores. 

Las emociones de Millonarios vs. Nacional llegaron en el segundo tiempo

En cambio, el arranque de la segunda etapa, que se retrasó por una humareda azul que tapó completamente la cancha, fue más parecido a lo que se esperaba del juego. 

Ya hubo exigencias para los dos arqueros: Ospina se exigió para tapar un remate de Daniel Ruiz y Álvaro Montero se la jugó y le ganó en un mano a mano a Kevin Viveros. 

Pero el entusiasmo inicial se fue apagando y los que más trabajo tuvieron en el resto del partido fueron los departamentos médicos de los dos equipos, no por entradas violentas, sino por choques fortuitos. El más grave, cuando se estrellaron las cabezas de Helibelton Palacios y Camilo Cándido, que sacó al uruguayo de la cancha y que hizo entrar una ambulancia a la zona de traslado de El Campín.

Millonarios le metió un poquito más de experiencia a la nómina: Daniel Cataño reemplazó a Ruiz, que se fue con una molestia en el tobillo. 

Nacional también refrescó su ofensiva, con Kevin Viveros y Andrés Sarmiento en lugar de Dairon Asprilla y Alfredo Morelos, que poco antes de irse también pudo abrir el marcador, pero no pudo rematar cómodo, merced a un gran cierre de Andrés Llinás. 

El arduo trabajo de los médicos acabó enfriando el partido y fueron escasos los remates, incluso los acercamientos a las porterías. Nacional controló y se llevó un punto y Millonarios, con el otro, recuperó el primer lugar de la Liga antes de visitar al América. 

José Orlando Ascencio

Subeditor de Deportes

@josasc

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