'Me mudé de Estados Unidos a Europa; después de 4 años, este consejo me hizo sentir en casa'

hace 2 días 21

Durante años, Grace luchó contra la nostalgia, comparando constantemente su nueva vida con la que dejó atrás. "Echaba de menos los salarios estadounidenses, las festividades e incluso a mi dentista de familia", confesó. 

Pero un día, una amiga de su grupo internacional de expatriados la interrumpió con un consejo que cambiaría su perspectiva: "No puedes comparar". Esto la hizo cambiar y a partir de ahí comenzó a vivir plenamente.

Cómo aceptó la adaptación en Europa tras vivir en Estados Unidos y el tiempo que esto le llevó

Al principio, Grace resistió el consejo de su amiga que era expatriada como ella. Pero con los años, entendió que era la clave para sentirse en casa. "Las comparaciones son naturales, pero solo me cegaron ante lo que Francia me estaba dando", admitió en diálogo con Business Insider.

Paris, Francia

La adaptación a la vida en París no le fue nada fácil. Foto:iStock

Aunque escuchó que adaptarse toma dos años, a ella le llevó cuatro, más un año en Londres y una mudanza al sur de Francia, de donde es su esposo. El cambio llegó cuando dejó de medir todo contra su vida en Estados Unidos. "Gano menos aquí, y ver a mis amigos ascender en sus carreras a veces me hace dudar", reconoció.

También le cuesta estar lejos en momentos importantes, como bodas o funerales, y extraña detalles cotidianos, como visitar SoulCycle o Trader Joe's.

Pero Francia le dio otras oportunidades: trabaja menos, redujo su estrés y redefinió su carrera. A los 25 años, se volvió autónoma, dio clases en una universidad francesa y construyó una vida alrededor de sus pasiones que son la escritura, la música y el trabajo social. Además, formó una red de amigos internacionales que hoy son como su familia.

Aunque planea su futuro en Francia, Grace no olvida sus raíces. "Estados Unidos siempre será parte de mí", afirmó. Incluso en momentos agridulces, como imaginar que sus hijos tendrán una infancia distinta a la suya, la ilusión por verlos crecer en un país que ama la equilibra.

Su mensaje para quienes emigran es claro: no hay que recaer en las comparaciones y es importante aprender a apreciar el momento.

Leer Todo el Artículo