Las denuncias, la citación a un apartamento y la motocicleta: las pistas detrás del asesinato de excongresista en Armenia

En medio de la consternación que ha generado en Armenia el homicidio del excongresista y periodista, Óscar Gómez Agudelo, a manos de un sicario que lo ultimó mientras éste intentaba ingresar a la emisora donde trabajaba, se han conocido varias entrevistas que el expolítico concedió antes de su muerte y donde aseguró que lo habían amenazado.

Hace meses, Gómez Agudelo dijo en una emisión local de RCN Radio Armenia que “hay mafias que están empoderadas en la ciudad, pocos se atreven a tocar el tema pero tiene que haber alguien que se las enfrente”.

En la misma entrevista dijo que estaba arriesgando su vida y que lo único que les restaba era mandarlo a asesinar.

“Una vez fui citado a un apartamento en el norte de Armenia donde con pistola en mano me dijeron que tenía que dejar de hablar. Me hicieron llorar porque eran seis personas muy representativas hoy, con importantes cargos en la ciudad, quienes me hicieron una encerrona, me citaron alrededor de las 4:00 de la tarde, por fortuna iba acompañado y después de ahí grabé unas memorias que entregué a cinco personas diferentes. Les advertí a ellos que si algo me llegaba a suceder las entregaran”.

Esta entrevista se conoció luego de que el comandante de la Policía del Quindío, coronel Luis Fernando Atuesta, señaló este viernes que tenía comunicación directa con el periodista porque le transmitía las denuncias de la comunidad, pero que no le informó de amenazas contra su vida.

“No tenemos noticias frente a amenazas que haya recibido, no tenía ninguna activación de ruta por amenazas o medidas de protección producto de amenazas. No tenemos antecedentes frente a este tema. Es un compromiso del comando de policía del departamento dar con los responsables de este hecho”.

Según estableció este medio, las denuncias que Gómez Agudelo venía realizando en su programa ‘La comunidad por la comunidad’ transmitido por la emisora Rumba del Café estaban relacionados con el deterioro de la malla vial de la ciudad, la privatización de algunas entidades públicas y la concesión de algunos servicios que pasarían a ser prestados por empresas privadas.

Su compañera de emisora, Adriana Garzón García, y quien fue una de las personas que trató de auxiliarlo después de ser baleado, dijo ante varios medios de la ciudad que Gómez Agudelo denunciaba situaciones de la ciudad.

“Desde el programa que él tenía, él era de hablar escuetamente de las situaciones que denunciaba, cosas graves de aquí de la ciudad. Él hablaba así la verdad. Muy grave que por decir la verdad o denunciar hechos que vienen ocurriendo en la ciudad, hechos que en este momento no quiero hablar porque no quiero que me pase lo mismo, lo conviertan a uno en blanco de muerte por parte de sicarios y de gente que está dedicada a la comisión del delito y la corrupción”, dijo.

Unas horas después del crimen, el abogado Felipe Urrea, dueño de la emisora donde Gómez Agudelo tenía su programa, hizo una grave acusación contra un hombre que estaría manejando los hilos de la Alcaldía de Armenia, y que habría amenazado a ese medio radial y a varios de sus periodistas, entre ellos a Gómez Agudelo.

De hecho, hace cinco meses, Urrea y otros veedores más de la ciudad suspendieron sus labores por temor a ser víctimas de atentados luego del homicidio de Óscar David Suárez Marín, hijastro del reconocido veedor Alejandro Rodríguez Torres, y quien fue baleado en su propia casa el pasado 24 de agosto.

Aunque este crimen no ha sido esclarecido, las razones apuntarían a las labores que ejercía su padrastro, quien desde hace años se desempeña como coordinador de la Junta Ciudadana, una organización con la que ha denunciado entramados de corrupción, deficiencia en la prestación de servicios públicos y privatización de entidades. Algunas de estas son similares a las denuncias de Óscar Gómez Agudelo.

El hallazgo de la motocicleta

En medio de la investigación del crimen de Gómez Agudelo se conoció que las autoridades hallaron la motocicleta en la que se movilizaban los dos sicarios que terminaron con la vida del expolítico.

“Se está trasladando (hacia Armenia) un grupo especial de la Dijín para acompañar la investigación pertinente, tenemos un grupo también por parte de la policía judicial que está investigando las cámaras de seguridad durante este suceso y todas las vías de evacuación que ellos utilizaron”, dijo el secretario del Interior del Quindío, Jaime Andrés Pérez.

La Gobernación del Quindío ofreció 50 millones de pesos de recompensa por información sobre este crimen y la Alcaldía de Armenia ofreció otros 50 millones de pesos.

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Redacción Nación