La fascinante presentación de Linkin Park en Bogotá: son altas las expectativas por su nuevo álbum 'From Zero'

Más de 20.000 personas de todas las regiones de Colombia y Latinoamérica se reunieron la noche del lunes 11 de noviembre en el Coliseo MedPlus de Bogotá para vibrar al ritmo de The Emptiness Machine, el nuevo sencillo de Linkin Park. La canción, que fue interpretada dos veces debido a algunas fallas técnicas de sonido, hace parte del nuevo álbum From Zero cuyo lanzamiento está programado para este viernes 15 de noviembre. 

En un momento sorprendente e inesperado para algunos, la banda de Mike Shinoda volvió al escenario con la gira From Zero World Tour, luego de siete años de ausentismo debido a trágica muerte del ex vocalista principal Chester Bennington. Hasta ahora, Bogotá y São Paulo (Brasil), son las únicas ciudades latinoamericanas donde el grupo de nu metal ha decidido presentarse con su más reciente alineación, que incluye a la nueva vocalista Emily Armstrong y el baterista Colin Brittain, que toma el relevo de Rob Bourdon.

Sin duda, el repertorio de ambos sorprendió notablemente al público colombiano (y latinoamericano) durante un poco más de dos horas de concierto y la expectativa por el álbum que se avecina crece cada día más. 

Solo para tener una idea, el analista Mark Chinapen escribió para la revista Modern Music Analysis, una reseña sobre The Emptiness Machine en la que asegura que el sencillo está en sintonía con gran parte del material de Linkin Park de la década de 2010. Además, le dio una calificación sólida de 9 de 10, asegurando que es una canción contundente, energética y una excelente manera de dar la bienvenida a los fans después de tanto tiempo.

"Es menos nu-metal, pero más rock alternativo. Ese ritmo característico que Linkin Park perfeccionó con canciones como Castle of Glass o incluso temas más antiguos como Faint se puede sentir en esta nueva canción. Toda la pista simplemente se siente viva, como si la banda hubiera vuelto a la vida. Las guitarras y la batería suenan increíbles, especialmente alrededor del minuto 1 cuando colisionan juntas", señaló. 

La interpretación del nuevo sencillo fue uno de los momentos más emotivos del concierto. Asistentes coincidían con la idea de que Mike Shinoda y Emily Armstrong lograron crear una narrativa lírica de confrontación con quienes alguna vez dudaron del futuro de Linkin Park, explorando la pérdida de identidad y el esfuerzo por cumplir con las expectativas de los fans. Para ellos (los fans), la canción encapsula la determinación de la banda de continuar y de transformar el dolor y la incertidumbre en un poderoso mensaje de resiliencia.

Éxitos que marcaron la generación de los 2000

Pero no todo el repertorio se trató del nuevo lanzamiento. Es más, el corazón de una generación entera se conmovió con temas como In the End, Numb, What I've Done y Bleed It Out, entre otros. El recinto, repleto de luces tricolor (amarillo, azul y rojo), volvió a sumergirse en aquella narrativa de redención y cambio que evoluciona -a través de la música- de la lucha personal a la conciencia colectiva, transformando el dolor y la frustración en un llamado para sanar al mundo y a uno mismo.

"Seguro conocen está canción", dijo Armstrong antes de empezar su interpretación de What I've Done. Su presentación impecable revivió esta tendencia de la banda por querer experimentar con baladas y canciones más melódicas desde 2007. Este cambio, que también fue temático, se mantiene: las letras se centran en cuestiones sociales, políticas y ambientales. Aquí, la narrativa de Linkin Park comenzó a incluir una mirada crítica al mundo, abogando por la autorreflexión y el cambio colectivo.

Y es que, en opinión de algunos críticos, la nueva integrante de Linkin Park (quien solía ser la vocalista de la banda Dead Sara), encaja bien en el concepto de la banda y mantiene el hilo del relato principal a flote con bastante fluidez. 

"Armstrong ciertamente debe llenar unos zapatos muy grandes", escribió el crítico de pop del New York Times, Jon Pareles. "Pero ha demostrado que comparte la habilidad de Bennington para alternar entre vocalizaciones melódicas y gritos desgarradores", aseguró.

Incluso los fans más acérrimos en la página de Reddit de Linkin Park parecieron, en su mayoría, complacidos. "Trae la energía y la presencia necesarias para encajar con el sonido de la banda sin intentar imitar a Chester", escribió uno de ellos, una opinión con la que coincieron varios de los asistentes al concierto. 

Luego de que los asistentes al evento mostraron su constante apoyo para Armstrong, el cierre llegó con Bleed It Out, una explosión de energía pura en el punto culminante de todo un recorrido musical. Esta canción, conocida por su ritmo frenético y su intensidad arrolladora, encapsula la esencia de la banda: una fusión de rap, rock y catarsis emocional que ha resonado en millones de fanáticos alrededor del mundo. 

"Bleed It Out es más que una canción; es una declaración de perseverancia, de enfrentar cada obstáculo con todo lo que se tiene hasta que no quede nada", dijo uno de los fans que asistió al concierto. 

Aunque todo estaba por terminar, la energía en el escenario era contagiosa, y el público saltaba al compás. El puente, con la pausa breve antes de regresar al frenesí, elevó la expectativa al máximo. La banda se unió con una sincronización perfecta, creando una atmósfera de caos controlado y liberador. Con la última explosión de sonidos, la canción se convirtió en un clamor de unidad y resistencia, como si cada grito y cada acorde fueran el eco de una promesa: no importa cuán dura sea la lucha, siempre habrá fuerzas para seguir.

Al acabar, solo hubo reconocimiento, aplausos y mucha expectativa para lo que se viene este 15 de noviembre con el lanzamiento de From Zero.