El director de la agencia de inteligencia interior israelí (Shin Bet), Ronen Bar, presentó este lunes dos declaraciones juradas -una confidencial y otra pública- al Tribunal Supremo israelí a fin de responder a las alegaciones con las que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, justificó su despido.
En una de ellas, el jefe del Shin Bet acusa a Netanyahu de haberle exigido lealtad personal.
Netanyahu está en medio de un juicio por los delitos de fraude, soborno y violación de la confianza. Foto:X: @ElNecio_Cuba
"Era claro" que en caso de crisis constitucional, Netanyahu esperaba que Bar obedeciera al primer ministro y no a los tribunales, escribió el jefe del Shin Bet.
Bar también dijo que Netanyahu le indicó "en más de una ocasión" que esperaba que el Shin Bet tomara medidas contra los israelíes involucrados en protestas antigubernamentales, "con especial atención en vigilar a los patrocinadores financieros de las protestas".
El jefe del Shin Bet también confirmó reportes de prensa según los cuales Netanyahu le había pedido ayuda para retrasar su testimonio en un juicio por corrupción.
En un comunicado posterior, la Oficina de Netanyahu rechazó todas las acusaciones y culpó a Bar de no haber impedido el lanzamiento de bengalas contra la casa de Netanyahu -su segunda residencia en Cesarea, la cual estaba vacía cuando sucedió el incidente en noviembre que dañó una ventana- y dijo que había "fracasado miserablemente en el manejo de la incitación contra la cúpula política, incluidos los llamamientos al asesinato del primer ministro".
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu. Foto:AFP
Además, el jefe del gobierno afirmó que Bar había "fallado" durante el ataque de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023.
Bar, sin embargo, rechaza firmemente las acusaciones según las cuales el Shin Bet no alertó a tiempo al primer ministro y a los demás servicios de seguridad el día del ataque.
Alrededor de las 03H00 del 7 de octubre de 2023, todas las agencias de seguridad habían recibido una alerta sobre "preparativos inusuales y la posibilidad de intenciones ofensivas por parte de Hamás", subrayó el Shin Bet.