Estados Unidos emitió este viernes su primera declaración en torno a la decisión del presidente Gustavo Petro de nombrar como gestores de paz a antiguos paramilitares y narcotraficantes como parte de su política de 'paz total'.
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En declaraciones a EL TIEMPO, el Departamento de Estado sostiene que si bien Estados Unidos sigue comprometido con la paz de Colombia, es esencial que cualquier acuerdo respete a las víctimas y cumpla con el derecho internacional humanitario.
"Estados Unidos sigue comprometido con apoyar la paz y la estabilidad en Colombia. Al mismo tiempo, creemos que se debe proteger el derecho a la justicia de las víctimas y que cualquier acuerdo debe cumplir con el derecho internacional humanitario y mejorar la protección de los civiles. Lo remitimos al Gobierno de Colombia para mayores comentarios", dijo un portavoz de esa dependencia a este diario.
El decreto firmado por Gustavo Petro
Estados Unidos sigue comprometido con apoyar la paz y la estabilidad en Colombia. Al mismo tiempo, creemos que se debe proteger el derecho a la justicia de las víctimas...
Esta semana, el presidente Gustavo Petro firmó un decreto en el que nombra como gestores paz a 18 de los jefes paramilitares que dejaron las armas hace dos décadas y muchos de los cuales fueron extraditados a Estados Unidos para que enfrentaran procesos por narcotráfico.
La idea del presidente Petro es que estos actores ayuden en los acercamientos de diálogo con grupos ilegales que operan en el territorio.
La designación como gestores de paz será inicialmente de seis meses y sus actividades serían desarrolladas en las “condiciones excepcionales” que defina la oficina de paz del Gobierno. El decreto aclara que la designación no modifica su "situación jurídica, ni las medidas de aseguramiento vigentes, o su régimen de libertad, ni conlleva beneficios judiciales”.
¿Por qué puede ser un dolor de cabeza para Petro el tema de los gestores de paz con la nueva administración de Donald Trump?
La decisión de los gestores de paz de Petro, en todo caso, ha despertado polémica en el país y, probablemente, le causará problemas a Petro con el nuevo gobierno de Donald Trump que arrancará el 20 de enero de 2025.
El senador Marco Rubio, que acaba de ser seleccionado como secretario de Estado de la nueva administración republicana, ha sido uno de los más fuertes críticos del presidente colombiano por nombrar al también exparamilitar Salvatore Mancuso como gestor de paz.
"El nombramiento de Mancuso como gestor de paz es problemático, sobre todo porque ha sido condenados por tribunales federales de Estados Unidos por tráfico de drogas y por tribunales colombianos por más de 1.500 casos de asesinato o desapariciones forzadas… Por lo tanto, le insto a rechazar cualquier solicitud del gobierno colombiano para la extradición de Mancuso, hasta que se revoque su nombramiento como “gestor de paz”, o haya evidencia creíble de que Mancuso cumplirá las penas impuestas por los tribunales colombianos", dijo Rubio en una carta al Fiscal General en la que pedía frenar su extradición.
En la misiva, Rubio sostiene que permitir la libertad de Mancuso y que represente al gobierno colombiano "en las negociaciones con narcotraficantes que se dedican a inundar nuestras comunidades con narcóticos, sería un insulto para los miles de colombianos que son víctimas de los crímenes que perpetró".
SERGIO GÓMEZ MASERI
Corresponsal de EL TIEMPO
Washington