En medio de las distintas polémicas que enfrenta el gobierno de Gustavo Petro, este martes se conoció la ponencia para tercer debate de la reforma política. El proyecto va a ser debatido por la Comisión Primera de Senado y trae varios cambios frente la propuesta que salió de Cámara.
Conforme a los criterios de
La modificación más importante es que se vuelve a la financiación de campañas tal como está actualmente. Desde la radicación del proyecto se estipuló que sería netamente estatal, pero para el tercer debate se modificó el articulado para que nuevamente privados puedan hacer aportes a campañas presidenciales y legislativas, como está en la actualidad.
"Las campañas para la elección popular de cargos y corporaciones públicas serán financiadas y parcialmente con recursos estatales", dice ahora el artículo 3 de la reforma cuando inicialmente decía "serán financiadas completamente con recursos estatales". Otro de los cambios en este apartado es que se deja claro que los topes de gastos serán limitados por ley y que en esta misma se podrá establecer una 2máxima cuantía de las contribuciones privadas". Esto deja en veremos el papel que jugaría el CNE en la definición de los topes.
En ese mismo artículo se quitó otro punto crucial de la reforma y es el que prohibía a la campañas "ofrecer o entregar donaciones, dádivas, prebendas o regalo a los ciudadanos, ni contratar transporte de electores para la fecha de elecciones y para actos y manifestaciones públicas a cargos uninominales y/o corporaciones públicas". Algunos congresistas se habían quejado sobre todo del punto sobre no poder suministrar el día de campaña, hicieron énfasis en que eso bajaría la participación en zonas de difícil acceso.
Cambios a la elección de magistrados del CNE
Uno de los puntos eje de la reforma política es tratar de minimizar el origen político de los magistrados del Consejo Nacional Electoral (CNE). Desde el inicio de la discusión y hasta ahora se han dado tres fórmulas distintas. En un primer lugar, en la redacción original del proyecto, se estableció que los magistrados del tribunal electoral iban a ser elegidos por as tres altas cortes y los aspirantes provendrían de una convocatoria pública.
Luego, para los dos primeros debates se incluyó en el articulado una fórmula en la que el Congreso volvía a participar de la elección. Se haría una convocatoria pública y el Legislativo elegía a los togados, una fórmula muy similar a la actual, que es ampliamente criticada por las dudas que genera el origen político de los miembros del CNE. La nueva propuesta es que se mantenga la elección por parte del Congreso pero las altas cortes presentarán tres ternas cada una para suplir los nueve cargos.
La polémica por sanciones
El último cambio hecho al articulado a debatir en el tercer debate es referente a las sanciones a los partidos políticos por avalar candidatos que, así no sean elegidos, resulten condenados en el periodo por el que aspiraron. Varios congresistas hicieron énfasis en que esto era injusto y se llegó a un punto medio.
En el nuevo texto se mantiene la sanción a los partidos si sus avalados son condenados durante el periodo al que aspiraron, así no hayan sido elegidos. Sin embargo, frente a estos últimos se deja claro que solo se procederá a castigar a las colectividades si los delitos por los que se condenó son "cometidos con anterioridad a la expedición del aval correspondiente".
Además de estos tres grandes cambios, se hicieron otros ligeros ajustes en la redacción. De esta forma, se espera que la próxima semana comience las discusiones de un proyecto que tiene los tiempos al ras para su debate pues debe estar aprobado en cuarto debate y conciliado antes del 16 de diciembre. De no ser así, no podrá ser debatido en su segunda vuelta, pues es un proyecto de reforma constitucional.
JUAN SEBASTIÁN LOMBO DELGADO
Redacción política