En video: emergencia en Santa Marta por deslizamiento que arrasó con viviendas y vehículos tras fuerte aguacero

El jueves por la noche, la tranquilidad de Santa Marta fue interrumpida por una corta pero intensa lluvia que desató el caos en varios barrios de la ciudad especialmente en San Fernando, ubicado al nororiente de la ciudad.

Eran aproximadamente las 7:00 p.m. cuando el aguacero desencadenó un desprendimiento masivo de cerro que arrasó con todo a su paso: casas, vehículos y motos, en un evento que dejó a la comunidad en estado de shock.

Los residentes no dudan en afirmar que, de no haber sido por la hora, la tragedia podría haber sido devastadora.

Consecuencias de la emergencia

Esa noche, la fuerza de la naturaleza se manifestó en un potente estruendo que sacudió las viviendas. El estrépito fue tan intenso que sacó de inmediato a los habitantes de sus hogares, quienes, presas del pánico, corrieron hacia la calle.

“Si esto hubiera pasado en la madrugada, mientras dormíamos, estaríamos hablando de una tragedia grave,” relató Miguel Campo, un vecino que aún parece no poder creer lo que sucedió.

Los vecinos, se vieron de repente en una escena de desastre, con una montaña de tierra y escombros que sepultó hogares y bienes materiales en cuestión de segundos.

Balance preliminar de la avalancha

La oficina de Gestión del Riesgo, liderada por Alex Velásquez, reportó un saldo preliminar de siete viviendas completamente destruidas y al menos 13 más con daños significativos. Entre las estructuras afectadas, algunas quedaron a punto de colapsar, obligando a sus habitantes a improvisar refuerzos rudimentarios para evitar que se vinieran abajo por completo.

Tres adultos mayores sufrieron lesiones durante el caos y tuvieron que ser trasladados a clínicas cercanas, mientras que más de 50 personas vieron sus vidas afectadas por la emergencia. Igualmente carros y motocicletas quedaron totalmente sepultados por la arena y las rocas.

La comunidad de San Fernando se unió en un esfuerzo de supervivencia y solidaridad, trabajando hombro a hombro para rescatar lo poco que quedó de sus hogares.

Se organizaron para remover escombros, desenterrar los automóviles y motos, y recuperar enseres personales de entre los restos de tierra y escombros.

A medida que la noche avanzaba, el temor de un nuevo deslizamiento mantuvo a todos despiertos, velando por sus hogares y seres queridos, y buscando maneras de proteger lo que la avalancha aún no había arrasado.

Las causas del derrumbe

El director de la oficina de Gestión del Riesgo, Alex Velásquez, acudió personalmente al lugar, reafirmando el compromiso de la Alcaldía en brindar asistencia a los damnificados y establecer medidas para mitigar el impacto de posibles nuevas emergencias.

La realidad es que este no es un caso aislado; la deforestación causada por asentamientos informales en las laderas de los cerros alrededor de la ciudad incrementa la vulnerabilidad ante fenómenos naturales, en particular durante la temporada de lluvias.

Con la llegada del fin de semana festivo y el pronóstico de más lluvias intensas, las autoridades han emitido una alerta para todas las comunidades cercanas a cerros.

El temor en el aire es palpable, y las calles del barrio San Fernando lucen irreconocibles, transformadas en un escenario de desolación y de autos anegados en aguas turbias.

Mientras el sol comienza a despuntar en el horizonte, San Fernando sigue sin poder dormir, con la incertidumbre y el miedo como inquilinos involuntarios. Los residentes saben que, aunque la lluvia se haya detenido, el riesgo persiste.

Por Roger Urieles

Especial para EL TIEMPO

Santa Marta