Familiares y amigos de José Luis Perdomo Hernández y Sonia Wehdeking Baños se reúnen para su sepelio este jueves 27 de marzo en la sede de la funeraria Los Olivos en la ciudad de Barrancabermeja, Santander, lugar de donde es oriunda la pareja de esposos que falleció a manos de su propio hijo el pasado sábado 22 de marzo en horas de la madrugada.
El crimen registrado dentro de un apartamento consternó a la comunidad, especialmente en el municipio de Villavicencio, en el barrio Kirpas, por cuenta de una escabrosa situación que dejó confundidos a los vecinos y allegados de la familia, quienes describían la relación entre las víctimas y victimario, un joven de 24 años identificado como Juan David Perdomo, con la palabra tranquila, además de apuntar que se les veía unidos y hasta "cariñosos".
Así lo confirmó uno de los habitantes del sector, que, en entrevista con Noticias Caracol, afirmó que, en los ocho meses que llevaban residiendo en el edificio y en la zona, nunca se vieron envueltos en discusiones.
"La verdad no se espera eso de un hijo (...) Lo único que se escucha es que es hijo único y que estaba muy consentido. Todo le otorgaban a las cosas que él pedía", relató Danilo Tique, vecino del barrio. Las autoridades le explicaron a EL TIEMPO que, incluso, el matrimonio se había mudado desde Santander para acompañar y apoyar económicamente a Juan David en sus estudios universitarios.
Audiencia de Juan David Perdomo Foto:ARCHIVO PARTICULAR
Sin embargo, todo cambió la madrugada del sábado, sobre las 5:45 a. m., cuando gritos y golpes se escucharon dentro de la vivienda, ubicada en el segundo piso de un complejo localizado la carrera 24 #15A-106.
Allí la Policía Metropolitana de Villavicencio se encontró con "un hecho de intolerancia en donde dos personas fueron agredidas con arma cortopunzante, un hombre y una mujer perdieron la vida. Quienes habrían sido agredidos al interior de una vivienda producto de un individuo quien prendió la huida en un vehículo y que vivía en este hogar", según explicó el coronel Milton Andrés Melo González en un reporte preliminar.
Los rostros de los padres asesinados por su hijo en Villavicencio
Padres asesinados por su hijo. Foto:Redes sociales
Las víctimas fueron identificadas como José Luis Perdomo Hernández y Sonia Wehdeking Baños, de 46 y 45 años, respectivamente, padres del confeso asesino y titulares de un vehículo Hyundai blanco, modelo 2013, en el que el último huyó varios kilómetros hasta la ciudad de Bogotá, donde fue capturado.
En redes sociales, varios allegados compartieron fotografías de la pareja actualmente, que se observan como pantallazos de un video donde se les visualiza gesticulando palabras, y de algunas antiguas, recién casados y otras en compañía de Perdomo Wehdeking.
Tan pronto se conocieron los hechos, Gisell Wehdeking, hermana de Sonia y tía del victimario, se pronunció al respecto de la relación que tenía el joven con sus padres y subrayó que no tenían problemas.
Ellos eran la pareja que murió en Villavicencio. Foto:Redes sociales
"Era un excelente estudiante, era el que sobresalía y todo eso allá. Ya estaba a punto de graduarse. No tenía problemas con los papás, para nada. Antes lo sobreprotegían. No lo dejaban salir, lo llevaban y lo traían a la universidad", afirmó para el canal Citytv, de la Casa Editorial EL TIEMPO.
A través de un aviso se compartió que este jueves se tiene planeada una ceremonia religiosa en conmemoración de ambos desde las 10 de la mañana en la Iglesia Divino Salvador de Barrancabermeja. De igual forma, se programó la velación de los cuerpos y las honras fúnebres en el Cementerio Jardines del Silencio.
Familia asesinada en Villavicencio Foto:Redes sociales
Familiares explicaron que se hará el mismo sepelio para el matrimonio. En comentarios de una publicación de Facebook de Enlace Televisión, un medio local que anunció el evento, algunos allegados se pronunciaron y declararon sobre el padre, José Luis Perdomo, que era "un gran amigo con sus 'recochas' cuando vivía en Torcoroma y estudió en 'el Cuba', que descanse en paz y en su santo reino".
Así lo detalló un usuario reconocido como Wilber Caamaño Durán, quien en compañía de otros recordaron al hombre como una 'buena persona' y compañero de estudios en los años 90.
El funeral se llevó a cabo en Barrancabermeja, Santander. Foto:Archivo particular
"Exactamente en el año 1998, en su casa en Torcoroma, nos tomamos dos botellas de vino él, su novia, una amiga y yo. La mamá siempre nos atendía divina y cantamos 500 mil veces solo canciones del grupo niche", relató por su parte Lalau Camacho.
En otro de los mensajes, Carlos Rangel destacó que solía trabajar junto a él y que era "muy recochero el pana, buena gente, cristiano, amaba mucho a su hijo y a su familia, lo daba todo por ellos. Jugábamos campeonatos de micro, trabajador. Mucha Fortaleza para todos sus familiares".
Por lo pronto, EL TIEMPO conoció que Juan David aceptó los cargos del homicidio, que fue calificado como delito agravado y con sevicia. Lo último, según el equipo investigador Fiscalía General de Nación, se concluyó tras conocer el estado del arma utilizada en los hechos.
"El arma cortopunzante, de tipo cuchillo, resultó incluso partida de tantas y tan sistemáticas pulsaciones en los cuerpos de sus padres. Por estos hechos, le imputamos el delito de homicidio. (...) La pena será de 480 a 600 meses si la víctima es el padre o la madre y se actúa con sevicia", describió la entidad, indicando que su condena podría llegar a alcanzar entre los 40 y 50 años de cárcel.
REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS.