De acuerdo con el Área Metropolitana del Valle de Aburrá (AMVA), en octubre se registraron 24 eventos de precipitación durante esta segunda temporada de lluvias.
Conforme a los criterios de
De los 10 municipios de la subregión, Barbosa y Caldas son los que registraron mayores registros de lluvias acumuladas.
Mientras que en el norte los niveles fueron muy por debajo de lo esperado, en Medellín y municipios del sur estuvieron dentro de lo esperado, informó la entidad.
“Se reportaron descargas eléctricas menores al promedio histórico en casi todos los municipios, con excepción de Envigado e Itagüí”, indicó la autoridad ambiental.
La precisión para entregar toda esta información, indicó el AMVA, es gracias a uno de los recursos más importantes que tienen para obtener información sobre eventos de precipitación y el seguimiento de las diferentes variables del clima.
Se trata de un Radar Meteorológico, el cual tiene un alcance de más de 120 kilómetros y cuenta con detección precisa de la lluvia, granizo y tormentas en tiempo real.
Este innovador sistema, ubicado en el corregimiento de Santa Elena, fue instalado en 2011 y no solo abarca el Valle de Aburrá, sino también zonas cercanas e incluso regiones del Chocó y el
Magdalena Medio.
Esto permite a las autoridades y organismos de gestión del
riesgo contar con datos en tiempo real sobre las condiciones meteorológicas, esenciales para anticipar fenómenos como lluvias torrenciales, tormentas eléctricas, e incluso posibles inundaciones.
Así lo explicó Julián Sepúlveda, líder del equipo de meteorología de Sistema de Alertas Tempranas (SIATA), quien contó que este radar, permite entre otras cosas, “realizar detección precisa de precipitaciones, detectando la lluvia, granizo y tormentas en tiempo real, ayudando a predecir su intensidad, duración y ubicación exacta, permitiendo el seguimiento de tormentas, facilitando predicciones meteorológicas al integrar los datos obtenidos por el radar, en los modelos meteorológicos utilizados para prever cambios inmediatos en el clima”.
Así funciona
El radar meteorológico utiliza una antena parabólica que emite ondas electromagnéticas, las cuales, según los investigadores del proyecto, interactúan con
partículas de agua, hielo o nieve presentes en la atmósfera, y la señal que regresa al radar genera la ubicación, distancia e intensidad de las precipitaciones.
Esta información, procesada por algoritmos avanzados desarrollados por el equipo humano, se traduce en alertas tempranas que son cruciales para la toma de decisiones por parte de los organismos encargados de la gestión del riesgo.
Desde el AMVA indicaron que el radar es sometido a revisiones y mejoras cada año para garantizar su operatividad continua y precisa.
"Además, el acceso público a los datos meteorológicos a través del Geoportal de SIATA ha permitido que cualquier ciudadano, organización o entidad gubernamental consulte la información en tiempo real, lo que facilita una respuesta más rápida y efectiva ante eventos climáticos", puntualizaron desde la autoridad ambiental.
Otras alertas por lluvias
Agregó el Área Metropolitana que durante la segunda temporada de lluvias se han presentado 23 aumentos de nivel en diferentes quebradas de la subregión que podrían estar asociados a inundaciones o avenidas torrenciales.
Esta situación, sumada a la no correcta disposición de basuras y residuos se convierten en elementos que pueden propiciar riesgos para la comunidad.
Desde pequeños empaques hasta muebles y colchones que son tirados a las quebradas y afluentes, son algunas situaciones advertidas por la entidad.
”La disposición inadecuada de residuos obstruye desagües y drenajes, impidiendo que el agua fluya con normalidad. Cuando llueve, el agua no puede salir correctamente, lo que provoca acumulaciones y, en consecuencia, inundaciones. Además, los desechos pueden crear tapones que aumentan la velocidad del agua, causando avenidas torrenciales”, explicó Luz Jeannette Mejía, líder de la unidad de Gestión del Riesgo y Cambio Climático del AMVA.
Cuando llueve, el agua no puede salir correctamente, lo que provoca acumulaciones y, en consecuencia, inundaciones
Desde la autoridad ambiental resaltan la importancia de conservar limpios los canales de desagüe y evitar construcciones en zonas de alto riesgo.
Asimismo, en caso de emergencias, se recomienda evacuar la zona, dirigirse hacia un lugar seguro y contactar a los organismos de
emergencia para una atención oportuna.