El mantenimiento de una buena salud ósea y energía depende en gran medida de un mineral esencial: el calcio. Este nutriente es la base estructural de los huesos y dientes, además de que juega un papel en funciones corporales como la contracción muscular, la transmisión nerviosa y la liberación de hormonas.
De acuerdo con los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés), es el mineral más abundante en el cuerpo humano y constituye la base del tejido óseo.
Aproximadamente el 99% del calcio del cuerpo se encuentra en los huesos y los dientes, proporcionándoles la dureza y resistencia necesarias para soportar el peso corporal y resistir impactos. Además, el calcio interviene en la contracción muscular, incluida la del corazón, y en la transmisión de impulsos nerviosos.
El calcio se encuentra en diversos alimentos Foto:iStock
Si su dieta no incluye suficiente calcio, su cuerpo comienza a extraerlo de los huesos, lo que con el tiempo puede debilitar su estructura y hacerlos más propensos a fracturas. Este proceso puede derivar en osteoporosis, una enfermedad caracterizada por la pérdida de densidad ósea y un mayor riesgo de fracturas.
¿Cuál es la importancia de la vitamina D en la absorción del calcio?
Para que el calcio sea efectivo en el cuerpo, necesita de un aliado clave: la vitamina D. Esta vitamina facilita la absorción del calcio en el intestino, asegurando que llegue a los huesos y cumpla su función de fortalecimiento.
Sin suficiente vitamina D, el calcio no puede ser utilizado eficientemente, lo que puede llevar a la desmineralización ósea y enfermedades como el raquitismo en niños y la osteomalacia en adultos.
Para mantener huesos fuertes y niveles de energía óptimos, es esencial consumir una dieta equilibrada rica en estos nutrientes. Algunas de las mejores fuentes de calcio incluyen:
- Productos lácteos como leche, yogur y queso.
- Pescados como sardinas y salmón enlatado (con espinas).
- Vegetales de hojas verdes como la col rizada y el brócoli.
- Alimentos fortificados como cereales y bebidas vegetales.
Por otro lado, la vitamina D puede obtenerse de:
- Exposición moderada al sol.
- Pescados grasos como el salmón y el atún.
- Lácteos y jugos fortificados con vitamina D.
- Suplementos recomendados por profesionales de la salud.
La cantidad de calcio y vitamina D recomendada varía según la edad y el género. En general, los adultos necesitan alrededor de 1.000 mg de calcio al día, mientras que los mayores de 50 años requieren 1.200 mg para mantener la densidad ósea. En cuanto a la vitamina D, la dosis recomendada es de 600 a 800 UI diarias, dependiendo de la edad.