"Nicolás Maduro ha asumido el compromiso de impulsar esas transformaciones necesarias para poder darle una oportunidad a la humanidad, para poder darle una oportunidad a la vida". Con estas palabras del ministro del Poder Popular para las Relaciones Internacionales de Venezuela, Yvan Gil, se cerró la apertura del segmento de alto nivel de la COP16, en Cali, al que incluso asistió el secretario general de la ONU, António Guterrez, quien no lo saludó.
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"Casi no lo aplaudieron. Nadie dijo nada", le dijo a EL TIEMPO una de las personas presentes en el auditorio principal de la zona azul del Centro de Eventos Valle del Pacífico. Probablemente, para nadie en la sala era un secreto que el régimen de Venezuela pasa por uno de sus momentos de mayor descrédito a nivel internacional tras las denuncias de fraude electoral en las elecciones del pasado 28 de julio y que luego de tres meses no ha sido capaz de demostrar su triunfo.
Y si bien el gobierno del presente Gustavo Petro no ha reconocido la reelección de Maduro y dice que no lo hará hasta que se publiquen las actas, expertos señalan que la participación en la cumbre de biodiversidad del canciller Gil en Cali le está sirviendo al régimen como una especie de vitrina internacional para lavar imagen ante el mundo.
"Está utilizando la plataforma que le ha brindado el gobierno colombiano en el marco de la COP16 para mostrar que las cosas están funcionando normalmente", comenta Eduardo Velosa, director de la Maestría en Estudios Internacionales de la Pontificia Universidad Javeriana.
Yendo a los hechos, desde que fue recibido en suelo vallecaucano por Luis Gilberto Murillo, el canciller Gil no ha dejado de negar varios señalamientos. "Hoy se cumplen tres meses de esa fabulosa elección", dijo sobre los comicios del 28 de julio.
También, sobre la persecución a opositores políticos, aseveró que "Venezuela es un país libre de presos políticos". Y defendió la situación de derechos humanos en el país vecino a pesar de que informes internacionales hablan de una represión sin precedentes y más de 1.200 personas detenidas. "En Venezuela existe un Estado de Derecho Operativo".
Por su parte, el presidente Petro no se olvidó de la crisis en el vecino país y en su discurso de ayer reiteró su rechazo a las sanciones impuestas por Estados Unidos, sugiriendo que la migración venezolana se debe a este aspecto: "¿Qué se ha hecho con los dineros del petróleo extraído? Venezuela bloqueado hoy, una parte de la sociedad literalmente muriendo de hambre (…) por aquí pasaron 3 millones de venezolanos ahora van a EE. UU., que fue quien ideo bloquear a Venezuela, víctima de su propio invento".
"Resulta preocupante que el gobierno colombiano haya permitido la participación del canciller venezolano, Yván Gil, en la COP16. Aún más considerando el historial de destrucción medioambiental de la que es responsable el estado venezolano. Frente a esta falta de contundencia queda nuevamente comprobado que el gobierno colombiano se ha convertido lamentablemente en cómplice del autoritarismo en Venezuela", dice María Gabriela Trompetero, investigadora y docente en la Universidad de Bielefeld (Alemania).
Incluso, para Velosa es diciente que en la reunión sostenida con Murillo no se abordara el tema de las actas electorales. "Esto porque para Colombia, según ha expresado el gobierno, el hacer públicas estas actas es el paso para el reconocimiento. Al silenciar este tema y abordar otros distintos se da la imagen de que todo está bien y que se manejan otros temas de la agenda internacional, en este caso el medio ambiente y su diversidad, como si el estado de cosas en Venezuela fuera normal".
Según el ministro colombiano, se trataron temas centrados en la biodiversidad. "No hablamos de lo electoral, hablamos de biodiversidad. De cómo reactivamos las mesas de trabajo de los ministerios de ambiente porque hay ecosistemas que compartimos y tenemos que ver cómo coordinamos para poder hacer control de actividades que puedan generar contaminación y deforestación”, informó el canciller.
Gil, en compañía del embajador de Venezuela en Colombia, Carlos Martínez, restó importancia al tema electoral y arremetió contra el sistema capitalista en la sociedad.
JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ
Periodista de Política