Cami, una mujer estadounidense que se autodenomina ‘The Laundromat Girl’ (‘la lavandera’, por su traducción al español), dejó su carrera como enfermera para dedicarse a su propio negocio de lavandería, y actualmente gana el triple de lo que solía percibir en su anterior profesión. Esta decisión la ha llevado no solo al éxito financiero, sino también a una vida más feliz y satisfactoria.
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Con 37 años, Cami había dedicado más de una década a trabajar como enfermera especializada en trasplantes de médula ósea. Su jornada laboral consistía en tres turnos semanales de 12 horas cada uno, empezando a las 5 de la mañana y regresando a casa después de las 8 de la noche, según lo reportado por 'Newsweek'. Aunque amaba su carrera, comenzó a sentir que no quería seguir ese ritmo de vida al llegar a los 50 o 60 años.
En sus propias palabras: “Recuerdo ver a otras enfermeras de la edad de mi madre y pensar que no quería seguir haciendo ese trabajo a su edad. Ser enfermera es extremadamente duro, estresante y agotador para el cuerpo. No quería pasar el resto de mi vida así”.
Su inversión en la lavandería
En 2020, decidió cambiar de rumbo y compró una lavandería por $300,000 dólares (aproximadamente 1.240 millones de pesos colombianos). Sin embargo, durante los primeros tres años, continuó trabajando como enfermera mientras administraba el negocio, lo que resultó ser un gran desafío.
Seis meses después de adquirir la lavandería, comenzó a ofrecer un servicio de recogida y entrega de ropa. “Recogemos la ropa de nuestros clientes, la lavamos, doblamos y luego la devolvemos unos días después. Esta parte del negocio ha crecido tanto que ahora genera más ingresos que el autoservicio tradicional”, explicó Cami.
De enfermera a empresaria
Cami siguió trabajando como enfermera hasta 2023. Hoy en día, solo dedica entre 10 y 15 horas semanales a su lavandería, ya que ha logrado contratar a un equipo confiable que le permite tener más tiempo libre. Pese a trabajar menos horas, su ingreso se ha triplicado en comparación con lo que ganaba como enfermera.
Además de su éxito financiero, Cami se dedica a motivar a otras personas a que se atrevan a seguir un camino similar al suyo. En su cuenta de TikTok (@laundromatgirl), comparte su experiencia y alienta a su audiencia a tomar riesgos para alcanzar la felicidad.
“Yo me arriesgué cuando compré mi lavandería, cuando lancé el servicio de recogida y entrega, y también cuando empecé a compartir mi historia en TikTok. Si no hubiera dado ese primer paso, aún estaría trabajando como enfermera, atrapada en una rutina. Apuesta por ti mismo, porque te sorprendería lo que puedes lograr”, concluye.
Hoy, Cami disfruta de una vida que nunca imaginó, gracias a la valentía de reinventarse y confiar en sus decisiones.
César Quispe / Mag. (El comercio - GDA)
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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial basada en información de Mag. (El Comercio - GDA) y contó con la revisión de una periodista y un editor.