En medio de la creciente guerra comercial entre Estados Unidos y China, el foco se ha desplazado a un nuevo campo de batalla: los artículos de lujo. Con la reciente decisión de Donald Trump de aumentar los aranceles hasta un 145 % para los productos importados desde el país asiático, algunas fábricas chinas han optado por responder de una manera poco convencional: revelando los secretos detrás de los precios exorbitantes de marcas de renombre mundial como Hermès.
A través de TikTok, el fabricante de bolsos Wang Sen desató una tormenta al publicar un video en el que desglosa el verdadero costo de producción del icónico bolso Birkin, uno de los símbolos más reconocidos del lujo en el mundo. "En tienda vale 38.000 dólares, pero solo esto producirlo", afirmaba el artesano, mientras explicaba en detalle los materiales y costos involucrados en su fabricación.
Sen reveló que Hermès solo utiliza cuero de tres proveedores europeos: Nuti (Italia), Weinheimer (Alemania) y Haas (Francia). Una pieza de cuero Togo, suficiente para un bolso Birkin, cuesta aproximadamente 450 dólares. A esto se suman 25 dólares del hilo de coser francés Fil Au Chinois, 150 dólares en herrajes de acero inoxidable tipo “Océano”, 50 dólares por el aceite italiano para bordes, 100 dólares por el forro interior de piel de cordero francés, 10 dólares por la cremallera suiza Riri y 600 dólares en mano de obra, principalmente en talleres asiáticos.
Incluso la clásica bolsita de tela que envuelve el bolso cuesta apenas 10 dólares. En total, la suma alcanza los 1.395 dólares.
La cifra está muy lejos del precio final que pagan los clientes en tiendas oficiales. ¿Por qué, entonces, cuesta más de 30 veces ese valor? Según Wang Sen, "el 90 % del precio que se paga es por el logotipo".
Pero detrás de esa afirmación hay mucho más. Los expertos explican que comprar un bolso de lujo no es solo adquirir un accesorio, sino acceder a un símbolo de estatus, exclusividad y aspiración. El precio elevado forma parte del atractivo: cuanto más inalcanzable es un producto, mayor es el deseo que genera. Así, el valor no está en los materiales, sino en lo que representa llevarlo.
Este tipo de revelaciones incomodan a las grandes firmas. De hecho, el video de Wang Sen fue eliminado de TikTok y su cuenta, suspendida. El fabricante acusa a la plataforma de censura: “Comparto información incómoda sobre el precio de los bolsos y eso enfada al capital detrás de las marcas de lujo”, denunció.
Mientras las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos siguen escalando, este tipo de filtraciones pone en entredicho los márgenes de ganancia de las grandes casas de moda y revela cómo el deseo, más que la materia prima, es lo que realmente se paga en el mercado del lujo.
REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS