'Boom' exportador del oro se vería afectado por nuevo impuesto que propone el Ministerio de Hacienda

A pesar del buen momento del precio internacional del oro, que ha alcanzado el techo de los 3.500 dólares por onza, las exportaciones y, en general, el sector aurífero podría sufrir un freno por un proyecto de decreto que pretende aumentar la retención en la fuente.

Con el decreto que alista el Ministerio de Hacienda, la retención en la fuente pasaría de 1 por ciento a 2,5 por ciento sobre el valor total del pago o abono en cuenta en las compras de oro efectuadas por las Sociedades de Comercialización Internacional.

Actualmente, bajo la normativa vigente, un minero que vende su producción a una Sociedad de Comercialización Internacional enfrenta una deducción total efectiva del 5 por ciento, que corresponde a un 4 por ciento de regalías y al 1 por ciento de retención en la fuente.

De acuerdo con Analdex, esta cifra ya se encuentra en el límite máximo recomendado por los expertos internacionales para mantener la viabilidad y competitividad del canal formal frente a las alternativas ilegales.

No obstante, el proyecto de decreto propone añadir una retención adicional del 1,5 por ciento (2,5 por ciento en total) a cargo de la Sociedad de Comercialización Internacional.

Simultáneamente, el mismo proyecto establece una autorretención general para la actividad de extracción de oro del 4,5 por ciento.

Si bien estas cargas se aplican en distintos momentos de la cadena, el efecto acumulado que percibe el minero de Minería Artesanal y de Pequeña Escala (Mape), representa una carga fiscal total implícita que asciende al 11 por ciento (4 por ciento de regalías + 2,5 por ciento de la nueva retención + 4,5 por ciento de autorretención).

Dada la naturaleza dispersa de la Mape, la alta fungibilidad del oro y la relativa simplicidad logística del contrabando, Analdex sugiere que la carga fiscal efectiva total sobre el oro Mape no debería superar un límite máximo viable del 5 por ciento. Más aún, la tasa considerada óptima para equilibrar la recaudación de ingresos y la prevención del contrabando se sitúa cercana al 3 por ciento.

Para Javier Díaz Molina, presidente de Analdex, “las consecuencias previsibles de este posible aumento en la retención en la fuente es menos formalidad, potencial menor recaudo y mayor inseguridad. Consideramos que la implementación de esta medida, lejos de fortalecer las finanzas públicas y el control estatal, generaría una serie de consecuencias negativas interconectada”.

El dirigente gremial también destacó que esta medida del Ministerio de Hacienda es un mensaje contradictorio en un momento en que el precio internacional del oro alcanzó los 3.500 dólares por onza.

Según cifras de la Dian, entre enero y febrero de 2025 las exportaciones de oro llegaron a 649 millones de dólares, con un aumento de 31,6 por ciento.

Las consecuencias del proyecto de decreto del Ministerio de Hacienda

La primera consecuencia es que podría haber una desviación masiva al mercado informal, ya que una carga fiscal percibida del 11 por ciento actuaría como un fuerte desincentivo para la comercialización formal.

Se estima, basados en la sensibilidad demostrada por el sector Mape a los cambios fiscales, que hasta un 90 por ciento de las 40 toneladas anuales de oro Mape que hoy podrían tener vocación de formalidad, se desviarían hacia mercados paralelos y rutas de contrabando.

También se estima un impacto fiscal potencialmente negativo, por lo que, si bien la intención es aumentar el recaudo por unidad vendida formalmente, la previsible y drástica reducción del volumen de oro comercializado, a través de canales legales, podría resultar en una disminución neta de los ingresos fiscales.

Un cálculo preliminar (basado en 40 toneladas de oro Mape y un precio de 3.500 dólares por onza) sugiere que el recaudo actual (con tasa efectiva del 5 por ciento) podría rondar los 225 millones de dólares anuales.

Mientras que con la nueva estructura (tasa efectiva del 11 por ciento aplicada sobre un volumen formal reducido al 10 por ciento del potencial) podría caer a cerca de 50 millones de dólares. Esto implicaría una pérdida neta potencial para el fisco de aproximadamente 175 millones de dólares anuales.

Bastaría, según los cálculos, con que un 55 por ciento del oro Mape se desvíe al contrabando para neutralizar completamente cualquier potencial ganancia derivada del aumento de las tarifas de retención.

Para Patrick Schein, presidente del grupo Gold by Gold, “las proyectadas alzas de presión impositiva, que en última instancia afectan directamente a los mineros, anularía los ingresos estatales del 2025 que habrían podido beneficiarse del aumento del 50 por ciento en el precio del oro desde 2024 hasta hoy. Aún peor, estas medidas podrían incentivar el mercado informal y el contrabando, debilitando aún más a todo el sector de la Mape”.

Patrick Schein también advirtió que, “con un solo decreto, se puede poner en riesgo la formalidad del sector y reducir significativamente los ingresos fiscales”.

De acuerdo con Analdex, otra consecuencia de esta medida sería un fortalecimiento involuntario de grupos armados, que sería la consecuencia más preocupante es el efecto sobre la seguridad.

El inevitable aumento del volumen de oro disponible para el contrabando fortalecería directamente las fuentes de financiación de los grupos armados ilegales que, como se mencionó, ya controlan parte importante de la producción y las rutas ilegales.

Para Gina D’Amato, directora de la Fundación Alianza por la Minería Responsable, que se especializa en Mape responsable en el mundo, los mineros artesanales y de pequeña escala enfrentan grandes desafíos para acceder a mercados formales y justos.

“Si se quita la posibilidad de generar un ingreso digno, vía medios formales como las Sociedad de Comercialización Internacional, se está incentivando la exploración de mercados informales, debilitando toda posibilidad de trazabilidad del flujo de los ingresos o de establecer el tipo de prácticas sociales y ambientales usadas para la extracción del mineral”, agregó.