El contrabando es un flagelo que golpea muy fuerte al país, no solo porque a través de este se evade el pago de impuestos, sino porque genera informalidad de la economía, afecta a la industria nacional, fomenta el desempleo y crea competencia desleal en el comercio.
Un reciente análisis de este fenómeno (Panorama del contrabando en Colombia - 2024), elaborado por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), permitió establecer que del total de productos que ingresaron a Colombia entre el 2018 y el 2023, cerca del 10 por ciento lo hizo de manera ilegal, es decir, sin el cumplimiento de los requisitos de ley ni los controles de las autoridades aduaneras.
En ese mismo periodo, el valor de las mercancías que ingresaron a Colombia de contrabando alcanzaron un valor de 41.430 millones de dólares, lo que arroja un promedio de 6.900 millones por cada uno de estos años y que la modalidad más utilizada fue la subfacturación, que no es otra cosa distinta que la declaración de importación con información errada.
"Se evidencia que el ingreso de mercancías de contrabando se realiza bajo las formalidades del proceso de nacionalización en aduanas, pero con una declaración que contiene información inexacta. Se infiere, por tanto, que los contrabandistas se aprovechan de las flexibilidades del actual estatuto aduanero y de las limitaciones de personal para la inspección en aduanas", asegura la Dian.
Los comerciantes sostienen que el daño que los contrabandistas le hacen al país es inmenso. "Colombia está inundada de contrabando", comentó Eduardo Visbal, vicepresidente de Comercio Exterior y Sector Automotor de Fenalco, quien agregó que mientras el comercio formal paga todos sus impuestos y cumple con todos los trámites de ley, quienes se dedican a esa actividad ilegal no lo hacen.
Y como si lo anterior no fuera suficiente, el directivo señala que "las autoridades están haciendo todo por incrementarle la rentabilidad" a dicha actividad.
El problema para los comerciantes se ha agrandado con el surgimiento de las plataformas internacionales de comercio electrónico, como Temu, Alibaba, shein, entre otras, las cuales son una competencia ilegal y desleal con el comercio organizado.
Comerciantes alertan por competencia desleal de algunas plataformas digitales. Foto:iStock
Compras en línea, otra amenaza
Según Fenalco, Cada día se importan muchos más productos a través de estas, cuyas compras por menos de 200 dólares, entran al país sin pagar IVA, ni aranceles, según lo que indica la ley. Además, con un agravante y es que amparados en una mala interpretación que hace la misma Dian sobre el TLC se ha favorecido una triangulación de productos asiáticos que llegan desde Estados Unidos, pero que son realmente fabricados en países como China.
Cálculos del gremio de los comerciantes indican que esas plataformas mueven unos 3 billones de pesos, de los cuales 2 billones son por contrabando y cerca de 1 billón por paqueteo, esto es ingreso de cientos de miles de paquetes pequeños para esquivar el pago de impuestos y otras obligaciones.
El análisis elaborado por la Dian muestra de hecho que el mayor volumen de mercancía de contrabando (28 por ciento) proviene de China. No obstante, el 80 por ciento de las que entran de manera ilegal al país se despacha de un listado de 17 países.
"China es el principal país de donde provienen mercancías que ingresan de contrabando, con un valor promedio de 2.119 millones de dólares anuales entre 2018 y 2022. Cerca del 30 por ciento del total del contrabando que entró a Colombia en esos cinco años llegó desde ese país. Después se encuentran Estados Unidos y Bolivia, cada uno con un contrabando anual promedio de 588 millones de dólares y una participación cercana al 10 por ciento", advierte el informe.
Aunque al país ingresa todo tipo de mercancía de contrabando, las confecciones y el calzado son dos de las categorías preferidas por quienes realizan esta actividad ilegal, que sigue creciendo y dejando pérdidas millonarias al comercio, la industria y la economía en general.
Impacto a textileros
Una de las industrias más afectadas por esta práctica ilegal es la textil confección. El análisis elaborado por la aduana da cuenta de que en promedio, cerca del 20 por ciento del valor de los textiles que entraron al país entre 2018 y 2022 fue contrabando.
Cargamento de zapatos de contrabando incautado por las autoridades aduaneras. Foto:Archivo particular
Y advierte que ese porcentaje duplica el del total de productos. En 2022, ingresaron a Colombia textiles por 2.788 millones de dólares, de los cuales 672 millones tuvieron irregularidades en el proceso. "En 2023, las materias textiles y las confecciones fueron los principales productos sometidos a medidas cautelares por la Dian en los controles aduaneros, y representaron un 25,4 por ciento del valor total de las aprehensiones de mercancía sospechosa de haber ingresado ilegalmente al país, enfatiza la entidad.
El contrabando técnico por subfacturación es la modalidad más empleada por las personas que se dedican a esa actividad ilegal en textiles, con más del 90 por ciento. En promedio, entre 2018 y 2022, hubo una subfacturación anual de 600 millones de dólares solo en ese sector, siendo 2018 y 2022 los años con los mayores niveles de contrabando en esta modalidad, 654 y 642 millones de dólares, respectivamente.
Por su parte, el contrabando abierto de textiles, otra de las modalidades empleadas, fue de 36 millones de dólares anuales en promedio.
Para Eduardo Visbal, directivo de Fenalco, no hay duda que estas son las dos mayores modalidades de contrabando que emplean los ilegales, pero advierte que también hay mucha falsificación de marca. "En Colombia hay todas las modalidades de contrabando, pero la más utilizada es la subfacturación", recalca.
Herramientas de combate
Para los empresarios es claro que el país debe adoptar una política más agresiva de lucha contra el contrabando, la cual no debe estar enfocada en la imposición de altos aranceles a ciertos productos que llegan del exterior porque eso termina siendo un estímulo al contrabando.
"Es muy ingenuo pensar que subiendo aranceles al 40 por ciento iba a florecer la producción nacional, todo lo contrario, desde la entrada en vigencia de esa iniciativa del Gobierno, en diciembre de 2022, llevamos 2 años de caída", explican desde el gremio de los comerciantes.
Por eso señalan que una de las maneras de combatir esa práctica ilegal, sobre todo con productos textiles, es bajar los aranceles de las confecciones del 40 por ciento a los niveles iniciales del 15 por ciento
"Si uno quiere controlar el contrabando y hay casos en que se ha demostrado, hay que bajar los aranceles, disminuir las regulaciones y hay que quitarle la discrecionalidad excesiva a los funcionarios aduaneros", recomienda Visbal
Dian alerta por falsa subasta con productos tecnológicos incautados en puertos y aduanas del país. Foto:iStock / Dian
Y en cuanto al tema de las plataformas, recomiendan a la Dian aplicar mecanismos que permitan reconocer los beneficios del TLC solo a los productos originarios de Estados Unidos y evitar que se siga presentando la masiva triangulación.
La Dian no ha sido indiferente a esa problemática y es consciente de que hay que combatir de frente este flagelo, por eso avanza en el proceso de modificación del estatuto aduanero. Uno de los principales cambios consiste en que, antes de que la mercancía carga llegue al puerto, se deberá presentar una declaración anticipada de importación, que contenga información detallada sobre lo que ingresa al país.
Otro cambio apunta a que todos los contenedores con mercancías bajo control aduanero estarán obligados a tener dispositivos de trazabilidad satelital que permitan su ubicación en tiempo real y alerten sobre intentos de apertura mientras circulan por el territorio nacional.
A largo plazo la Dian implementará un nuevo sistema tecnológico de aduanas que contará con módulos integrados de importaciones, exportaciones, carga, operaciones especiales, garantías, laboratorio de aduanas, valoración, origen y arancel.
Y como complemento a ese ajuste al Estatuto Aduanero, la Dian fortaleció su colaboración con la Fiscalía y la articulación con el Ministerio de Defensa, la Unidad de Información y Análisis Financiero (Uiaf), la Armada Nacional y la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol) de la Policía Nacional, entre otras autoridades.