Antes del cónclave, este documento secreto firmaron los funcionarios y trabajadores del Vaticano

El cónclave puede ser el evento más importante para el mundo católico. En él, tras varias jornadas de votación, se elegirá a un nuevo papa que llevará las riendas de la guia espiritual de los miles de millones de católicos que hay en el mundo. Por esto, se toman ciertas precauciones con respecto a la información. 

La igleia es una de las instituciones más antiguas de la historia. Su importancia hace que las decisiones que se tomen en ella tengan que ser hechas de manera hermética y, esta vez, no será diferente. La única información que saldrá de la capilla sixtina durante los días de cónclave será un humo de color blanco o negro que determinará la elección, o no, de un nuevo papa. 

El documento firmado por el personal del Vaticano que acompañará a los cardenales en el cónclave

Los trámites que preceden al cónclave se centran, principalmente, en dejar todo listo para la llegada de los 133 cardenales que, durante varios días, votarán por su preferido para regir la iglesia católica mundial. 

Después de la muerte de Francisco, los preparativos iniciaron inmediatamente para la preparación de las salas de la Capilla Sixtina en la que se harán las votaciones. 

Así también, las residencias en todo el sector se prepararon para recibir a los electores. Por otra parte, como forma de preservar la confidencialidad, inhibidores de señal fueron posicionados para que ninguna información permee las decisiones de los cardenales. 

Cada uno de ellos juró confidencialidad a lo que vaya a pasar allí y con las votaciones. Además, el personal que los acompañará, también firmó un documento en el que prometen guardar silencio sobre todo lo que sucede dentro de la Capilla en estos días. 

La firma se dio el pasado lunes, 5 de mayo, en la Capilla Paulina y fue llevada por el Camarlengo, el cardenal Joseph Farrell quien supervisó la jornada en la que todos los funcionarios que trabajaran en el lugar durante la historica elección.

Estas personas fueron aprobadas por Farrell y por los tres asistentes cardinales e incluye desde el maestro de ceremonias litúrgicas hasta oficiales de la seguridad suica y médicos, cocineros, entre otros miembros del personal. 

A cada uno se le dice el significado del juramento que harán para, posteriormente, firmarlo y pronunciar las palabras frente al Cardenal y dos testigos. El juramento es una promesa que los obliga a mantener un secreto absoluto sobre cualquier cosa relacionada con los votos. Esto incluye, además, el escrutinio y la grabación de los actos de elección.

Incluso, este juramento los ata a una obligación perpetua que solo puede ser levantada por el papa o sus sucesores. 

REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS.