Las redes sociales se han convertido en un escenario para realizar denuncias públicamente. En los últimos días, por medio de la red social X, antes Twitter, se conoció el video de un hombre robando un celular mientras era atendido en un establecimiento.
Se sabe qué los hechos ocurrieron en un montallantas de la localidad de Puente Aranda, en el centro de Bogotá. Asimismo, que el presunto ladrón, quien después se arrepintió, es un conductor de taxi que estaba siendo atendido en el local.
En el video grabado por las cámaras de seguridad del lugar, se puede ver cómo el hombre toma el celular que está sobre una montaña de llantas y lo guarda en el bolsillo de su pantalón, mientras la mujer está distraída realizando su labor.
Según las cámaras de seguridad, los hechos se habrían registrado el domingo 2 de marzo, en el barrio Ciudad Montes.
#BOGOTÁ. En cam/Seguridad quedó registrado el momento en que un taxista se embolsilla el celular de la trabajadora de un montallantas. Según informan, el hecho se presento la tarde-noche del pasado 02Mar, en el b/Ciudad Montes, loc/Puente Aranda.
Las imágenes de lo ocurrido se han popularizado en redes sociales, donde se pudo conocer la identidad del hombre, quien devolvió el dispositivo móvil y pidió disculpas al gremio de conductores.
El hombre aseguró que “se dejó llevar por la tentación del diablo” y por eso se apropió del dispositivo móvil.
“Cogí en un momento lo que no era mío, me dejé llevar por un impulso. Yo sé que cometí un error y pido mil disculpas a todos los compañeros del gremio, a la sociedad, fue una cosa que no tuve que haber hecho. Me dejé llevar por el impulso, me dejé llevar por la tentación del diablo”, dijo el taxista en un video difundido en redes sociales.
En el relato, el hombre contó que habló con la mujer a quien le hurtó el dispositivo, asegurando que le pidió disculpas por lo ocurrido y le pidió eliminar el video de redes sociales, ya que estaba arrepentido de su actuar.
Asimismo, se conoció que no fue él quien le entregó el celular a la mujer del montallantas, sino que uno de sus compañeros conductores “le hizo el favor”.
"Fue un impulso que de pronto cualquier persona en cualquier momento lo hace sin pensar ni nada. Yo no soy persona de merecer eso, no tengo problemas con la justicia ni antecedentes. Las empresas en las que he trabajado nunca he tenido una queja por eso. De la empresa me llamaron y dijeron que tan raro, que yo hiciera una cosa de estas", concluyó el hombre.
ALEJANDRA HERNÁNDEZ TORRES
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO