Probablemente lo usa a diario sin pensar en el impacto que tiene en su factura de electricidad. Hablamos de la secadora de ropa, uno de los electrodomésticos más comunes en los hogares, pero también uno de los más costosos en términos de consumo energético.
Según aclaró el portal Atco Energy, aunque muchos suponen que el refrigerador, el horno o incluso el aire acondicionado son los mayores responsables del gasto, la secadora supera a varios de ellos con un consumo promedio de 3000 vatios por hora de uso.
Este aparato consume hasta seis veces más energía que una lavadora y, dependiendo de la frecuencia con la que lo utilice, puede representar una parte significativa de su consumo mensual.
Si se pregunta por qué gasta tanto, la respuesta está en su sistema de calefacción interna, diseñado para evaporar la humedad de la ropa rápidamente. Este proceso requiere una gran cantidad de energía térmica y eléctrica.
¿Por qué la secadora de ropa impacta tanto en su factura de electricidad?
La clave está en la potencia. Mientras que una lavadora moderna utiliza en promedio unos 500 vatios por hora, la secadora necesita hasta 3000 vatios para funcionar correctamente.
La secadora requiere una gran cantidad de energía térmica y eléctrica Foto:Getty Images
Eso significa que cada ciclo completo de secado podría consumir seis veces más energía que el lavado previo. Si usted seca ropa cinco veces por semana, su consumo mensual solo en este electrodoméstico puede superar los 60 kilovatios-hora, dependiendo del modelo.
Además, el mal mantenimiento, como la acumulación de pelusa o el uso de ciclos largos innecesarios, puede incrementar aún más ese gasto. Por eso es fundamental optimizar su uso: limpiar los filtros con frecuencia, utilizar cargas completas y, siempre que el clima lo permita, optar por el tendido al aire libre.