La muerte del abogado de 30 años, Edgar Felipe Vargas Escudero aún sigue siendo un misterio. Sucedió en un establecimiento comercial al frente de la Universidad Industrial de Santander, UIS, en Bucaramanga, cuando compartía con una de sus mejores amigas.
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Un hombre sin mediar palabras se bajó de una motocicleta y le disparó directo a matarlo, pues usó el gatillo en siete ocasiones. El agresor iba vestido con un buzo negro, jean azul y un casco cerrado.
Huyó en la moto, pero cuadras después la dejó abandonada, pues aparentemente era robada. La amiga con la que departía el abogado víctima intentó auxiliarlo, lo llevó de inmediato al hospital Universitario de Santander, HUS, pero por la gravedad por las siete heridas ya no tenía signos vitales.
La policía reportó que recibió heridas letales, tres directas al pecho, dos en tórax izquierdo y derecho, una en el cuello y otra en el brazo.
"Se encontraba dialogando con la víctima en la parte externa del Oxxo, lugar al cual arriba un ciudadano a bordo de una Motocicleta NKD de color negro, de placas DJC-50H, quien desenfunda un arma de fuego y dispara en repetidas ocasiones en contra de la humanidad de la víctima, una vez el agresor comete el hecho huye del lugar con rumbo desconocido. En cuanto a la víctima está es auxiliada por su amiga Karen Sofía y por personal de la policía del cuadrante, quienes lo trasladan al Hospital Universitario de Santander, y de acuerdo a la gravedad de las heridas la víctima ingresa sin signos vitales", dice el reporte de la Policía.
Días antes, parece ser que el abogado habría sido amenazado de muerte, pues Jhon Emerson Pérez, quien es prestamista, confesó que le dio el poder a la víctima para que pudiera realizar un cobro de unas letras avaluadas en $94.500.000 millones de pesos.
Este habría sido el detonante por el que Egdar habría recibido amenazas, pero no le había comentado a nadie, pues el padre aseguró que se dedicaba a su labor de abogado, pero desconocía lo de las intimidaciones de muerte.
El papá del abogado, además, dio a conocer que se dedicaba a llevar unos procesos del cobro de unas letras de cambio por el valor aproximado de ciento ochenta millones de pesos.
Aunque esta es una de las hipótesis de su muerte, la policía no se ha pronunciado oficialmente sobre este hecho. El alcalde de Bucaramanga tampoco ha dejado ver un acto de rechazo por lo que sucedió.
Vargas Cordero tenía antecedentes judiciales por el delito de fraude procesal año 2023.
Melissa Múnera Zambrano
Corresponsal de EL TIEMPO- Bucaramanga.