Donald Trump continúa impulsando iniciativas con la intención de que un mayor número de migrantes puedan ser expulsados de Estados Unidos y ha pedido a la Corte Suprema que ponga fin al parole que protege a más de 500.000 cubanos, nicaragüenses, haitianos y venezolanos.
La decisión está en manos del máximo tribunal luego de que la secretaria de seguridad nacional, Kristi Noem, pidiera que se revocara la concesión de libertad condicional otorgada durante la administración Biden, medida que fue frenada por una jueza federal, tal como recordó el medio CBS News.
En su momento se indicó que alrededor de 532.000 personas perderían su estatus de parole el pasado 24 de abril. Sin embargo, una jueza determinó que Noem no tenía la facultad para cancelar la libertad condicional y que debían tomarse decisiones a nivel individual.
Pero ahora la administración Trump presentó una apelación de emergencia ante la Corte Suprema, afirmando que el secretario de seguridad nacional sí cuenta con el poder para terminar con la libertad condicional de los migrantes.
De hecho, el procurador general D. John Sauer dijo al medio que en su momento el tribunal de distrito usurpó el control del poder ejecutivo sobre política exterior e inmigración y anuló innecesariamente políticas migratorias cruciales.
Así, ahora se pide a la Corte Suprema que tome una decisión final con respecto al parole, de manera que las autoridades federales puedan deportar a los beneficiarios del programa.
Cabe señalar que la administración Trump ya ha recurrido al tribunal en busca de ayuda de emergencia para poder seguir avanzando sus planes ante las más de 200 impugnaciones legales que se han interpuesto en contra de sus políticas.
La decisión final la tomará la Suprema Corte. Foto:iStock
Miles de latinos llegaron a Estados Unidos legalmente, pero pronto podrían ser expulsados
Cabe recordar que, a finales de 2022, la administración Biden emitió un programa especial de libertad condicional que benefició a alrededor de 532.000 inmigrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela. En su momento se afirmó que la intención era promover la inmigración legal y disuadir a las personas de cruzar la frontera.
Así fue como miles de personas pudieron ingresar a Estados Unidos a través del patrocinio de quienes que ya se encontraban legalmente en el país. Posteriormente, se les concedió la libertad condicional y luego un permiso de trabajo.
Pero el programa de parole se suspendió cuando el presidente Donald Trump regresó a la Casa Blanca y ahora no se tiene claro si las personas beneficiarias podrán continuar en el país o serán expulsadas.