Independiente Medellín dejó la Liga en el limbo con su decisión de ir al TAS para apelar la decisión de darle a Junior los puntos del partido contra Nacional, jugado el 26 de septiembre y suspendido por una pelea entre barras bravas de ambos clubes.
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Ese día, los verdes ganaban 2-0. Poco después del segundo tanto se desató una pelea entre hinchas de Junior y Nacional en la tribuna norte del estadio Atanasio Girardot, que luego se extendió a otros sectores del estadio y dejaron 25 heridos.
El Comité Disciplinario del campeonato sancionó a los dos clubes, pero el que llevó la peor parte fue Nacional, que fue castigado con seis partidos a puerta cerrada, que luego le redujeron a tres, y le dieron el partido por perdido.
Esos tres puntos, considera el DIM, fueron determinantes para la clasificación de Junior y la eliminación del ‘Poderoso’, y por eso interponen el recurso, además de solicitar la medida cautelar de que no comiencen los cuadrangulares mientras se pronuncia el TAS.
¿Qué tan viable es que el TAS acoja el pedido del Medellín?
¿Qué tan viable es esto? EL TIEMPO consultó a una jurista acerca de este tema. “Es una jugada bastante creativa de los abogados, pero es perfectamente válida. Si el club cuenta con los recursos para presentar el reclamo ante el TAS, que es bastante costoso, vale la pena hacerlo si se tienen en cuenta las implicaciones económicas de no clasificar a torneos continentales”, opinó María José García Suárez, abogada especializada en derecho deportivo.
Ese proceso, de entrada, cuesta 1.000 francos suizos, solo con la presentación del recurso, y luego, cuando el TAS determine “el importe, el método y los plazos de pago de la provisión de fondos que incluyen los costos administrativos, los honorarios de los árbitros”, costaría entre 8.000 y 10.000 más, esto es, entre 40 y 50 millones de pesos.
“Los abogados tuvieron que argumentar muy bien por qué procede este recurso cuando han pasado casi dos meses del fallo. Lo más complicado para el DIM es argumentar que tiene legitimación para apelar una decisión que no los vincula directamente y segundo, la proporcionalidad de una medida cautelar que no afecta solamente al Medellín, sino a todos los equipos clasificados”, explicó García.
Sobre la posibilidad de que las finales no comiencen, la abogada reiteró: “Los árbitros que designen para ese caso tendrán que darle prioridad a la competición y por eso veo complicado que el tema prospere”.
“Hay que ver también si el Medellín contó con la posibilidad de clasificarse a los cuadrangulares luego de esa decisión. Uno podría decir que sí: así le hubieran asignado los puntos al Junior, ellos podían conseguir los resultados para clasificar, y no se dieron, por culpa de nadie distinto a ellos”, insistió la abogada.
¿Se puede parar el comienzo de los cuadrangulares?
Sobre la posibilidad de parar el campeonato, García dijo: "Estoy segura de que Dimayor no va a parar la competición, a menos que medie una medida cautelar efectivamente decretada por una autoridad judicial. Hay que tener en cuenta el principio 'Pro Competitione' que le da prioridad a la integridad y normal desarrollo de la competición, sobre cualquier otro tema".
"El DIM solicitó un procedimiento expedito y probablemente tendrán que resolver al menos las medidas cautelares muy pronto. Entre otras, para eso se acude ante el TAS, porque garantizan la celeridad que se necesita en el deporte", concluyó.
Cabe recordar que, una vez quedaron en firme las sanciones en todos los tribunales de la Dimayor, Atlético Nacional tenía pensado presentar el recurso ante el TAS, pero, finalmente, desistió de hacerlo.
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