“Probablemente no soy la persona adecuada para preguntar sobre el perdón porque no he perdonado. No perdonaré y no olvidaré nunca. Creo, ya sabes, y no creo en el cierre porque Nicole se ha ido, así que nunca hay cierre, aunque ahora esté fallecido. Así que para mí, no hay cierre. Nunca hubo perdón porque creo que cuando alguien hace un acto tan atroz y horrible, simplemente no puedo hacerlo. Así que soy la persona equivocada para preguntar sobre el perdón”.
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Con esta contundente frase Denise Brown revive lo que siente al recordar la tragedia tras la muerte de su hermana Nicole Brown, que era la esposa del famoso jugador de fútbol americano y actor O.J. Simpson y que desencadenó un episodio mediático de persecuciones en directo, un juicio que dividió a un país y el veredicto a favor de Simpson, en un caso que está conmemorando ya 30 años de ocurrido y que ahora visibiliza la pesadilla que vivió Nicole en un espiral de violencia doméstica y maltrato.
Eso se analiza en la serie documental ‘La vida y muerte de Nicole Brown Simpson’, que se emite hasta el 7 de noviembre en el canal Lifetime (5 p.m.) y que ofrece entrevistas y material de archivo exclusivo de un hecho que fue catalogado en su momento como el juicio del siglo, pero que enfocó su atención en una estrella deportiva famosa, antes de enfocarse en la víctima, que estuvo casada con O.J. y pidió el divorcio en 1992.
Dispuesta a empezar su nueva vida, comienza una nueva forma de tormento por parte de O.J. debido sus celos y naturaleza controladora. Según las tres hermanas de Nicole (Denise, Dominique y Tanya) que comparten su historia.
La noche del 12 de junio de 1994, Nicole Brown Simpson y su amigo Ronald Goldman fueron brutalmente asesinados frente a la casa de Nicole en el área de Brentwood de Los Ángeles. Ella tenía sólo 35 años cuando murió apuñalada y la violencia del crimen conmocionó a toda una nación. El descubrimiento de los cadáveres llevó a la intervención de la policía, y las sospechas rápidamente recayeron en O.J. como el culpable más probable.
Si bien el ex jugador fue absuelto de los cargos, en 1997, fue declarado responsable de los asesinatos después de una demanda civil presentada por las familias de las víctimas y se le ordenó pagar 33 millones de dólares.
Luego de un episodio en el que se describe cómo se conoció la pareja y los primeros conflictos en su convivencia, en la segunda parte-que se puede ver el 5 de noviembre en Lifetime- se revelan la nueva vida de Nicole y las consecuencias de tratar de rehacer también una vida amorosa.
“Nicole tenía 35 años cuando fue asesinada. Así que la mitad de su vida él estuvo allí. Entonces hubo un momento al principio, cuando ella era joven, cuando estaba creciendo, que íbamos a la playa, nos divertíamos, hacíamos fiestas, bailábamos, íbamos a andar a caballo, la pasábamos genial. Y Nicole y yo siempre teníamos las mismas amigas y la pasábamos súper bien. Y cuando yo tenía 18 años y yo me fui de mi casa, Nicole seguía en casa porque era más chica todavía. Y ella quería ser fotógrafa. Entonces yo pensé a ver, ella quiere ser fotógrafa y lo va a lograr, porque la van a ver a ella, van a ver sus fotos, las fotos que saca, que son hermosas. Y ahí la gente va a poder saber quién era Nicole. Y ese era nuestro objetivo y nuestra intención. Y espero que cuando la gente la vea y vea el documental, pueda saber quién era Nicole. Esa rubia hermosa, divertida. Era tan pura, tan pura”, recuerda su hermana en esta producción, para quien el problema alrededor de esta tragedia fue la obsesión, el abuso y un uso cruel del poder.
“El amor nunca debería doler. Y sabes, es como, no puedo enfatizarlo lo suficiente. Cuando entras en una relación, si alguien intenta controlar lo que haces, lo que dices, con quién hablas, cómo actúas, cómo te vistes, no es una relación sana. En las relaciones sanas, tú tienes derecho a decir no. Tienes derecho a ser tú misma. Tienes derecho a cambiar de opinión. Tienes derecho a ser tú misma. Y nadie puede quitártelo”, reflexiona Denise Brown.
“Hablamos sobre la violencia doméstica en el documental y estábamos tratando de educar a la gente que lo estaba viendo. Creo que cuanto más hablemos sobre la violencia doméstica, más se educará a la gente sobre esto, creo que es como un anuncio de televisión que tuvimos hace muchos años. Se lo cuentas a dos amigos y ellos se lo cuentan a otros dos amigos, y ellos se lo cuentan a otros dos amigos, y continuamos la conversación, hablamos de ello los 365 días del año”, finaliza.
Andrés Hoyos Vargas
EL TIEMPO
@AndresHoy1