Sentencias: así avanza chatarrización de veleros y yates abandonados en la bahía de Cartagena

La Dirección General Marítima (Dimar), a través de la Capitanía de Puerto de Cartagena, ha intensificado labores para el reciclaje de embarcaciones abandonadas o fuera de servicio en la bahía de Cartagena. 

Este trabajo es la respuesta a la sentencia del Consejo de Estado de agosto de 2020 que obliga a ejecutar el Plan Maestro de Restauración Ecológica de la zona.

Según la autoridad marítima, cinco embarcaciones han sido retiradas y recicladas: Conformity, Ángel Guardian, Don Rojas, Ta Chiao y Jolly Witch. También están en proceso de chatarrización Orión y Caribbean Express, con un avance del 50% y 60%, respectivamente.

"Por otro lado, las motonaves Yurbaco III, Fénix I y Gerchard están en trámite, mientras que Doña Dora, Rey David I, Revelation, Provider y Top Dog esperan su turno para completar el proceso", informa la Dimar.

Inspecciones y monitoreo en curso

La Capitanía de Puerto realiza inspecciones periódicas para evaluar el estado de conservación de las embarcaciones, determinar su navegabilidad y localizar a sus propietarios. Estas acciones buscan garantizar que las naves no generen contaminación ni representen riesgos para la navegación.

Según la Dimar, las embarcaciones en cuestión no están causando impactos ambientales inmediatos, pero es necesario que los propietarios acudan a las oficinas de la Autoridad Marítima Colombiana para abordar la situación de sus naves. En caso contrario, se procederá con su remoción y reciclaje, conforme a los protocolos establecidos.

Planes para 2025

El proceso de limpieza continuará en 2025, año en el que se espera avanzar en la remoción o reubicación de más embarcaciones. Los responsables deberán justificar las condiciones de abandono y deterioro, considerando que estas naves llevan más de un año sin registrar actividad y permanecen en áreas no autorizadas.

Compromiso con el medio ambiente

La Dimar reafirma su compromiso de proteger los cuerpos de agua de Cartagena. Estas acciones no solo buscan garantizar la seguridad en la navegación, sino también la conservación del ecosistema marino, clave para el desarrollo sostenible de la región.

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