En Santa Marta, se registró el asesinato de Jhonatan José Finol Lisandro, un joven barbero, de 27 años, quien fue ultimado de tres disparos en la cabeza dentro del establecimiento donde trabajaba.
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El crimen, perpetrado por un sicario que llegó directamente a llamarlo por su nombre antes de disparar, generó pánico entre clientes, compañeros de trabajo y vecinos de la zona.
Aunque inicialmente las personas cercanas a Finol describían al joven como un trabajador dedicado a su oficio, las investigaciones policiales revelaron un oscuro trasfondo.
Según el comandante encargado de la Policía Metropolitana, coronel Jaime Higgins Pacheco, Finol, de nacionalidad venezolana, llevaba una doble vida. Fuera de la barbería, utilizaba la aplicación Tinder para atraer a turistas nacionales y extranjeros, a quienes citaba en lugares apartados de la ciudad para despojarlos de sus pertenencias.
Un crimen que apunta a un ajuste de cuentas
El sicario que acabó con la vida de Finol Lisandro actuó con precisión y frialdad. Tras cometer el homicidio, huyó en una motocicleta conducida por un cómplice, dejando una escena de terror en el lugar de trabajo del joven.
Según el coronel Higgins, la principal hipótesis de las autoridades señala que se trató de un ajuste de cuentas entre bandas, posiblemente relacionado con las actividades delictivas que el barbero realizaba en paralelo a su oficio.
Las autoridades habían identificado a Finol como miembro de un grupo que empleaba perfiles falsos en redes sociales, principalmente con fotos de mujeres, para atraer a turistas.
Los encuentros solían concretarse en el Cerro de las Tres Cruces, donde las víctimas eran asaltadas. Este modus operandi ha sido motivo de varias denuncias en Santa Marta, permitiendo la captura de otros miembros de estas redes criminales en el pasado.
Llamado a la precaución para turistas
La Policía Metropolitana aprovechó este caso para reiterar a turistas y locales la importancia de ser cautelosos con las personas que conocen en redes sociales.
“Eviten compartir datos personales o citarse en lugares poco concurridos, especialmente si son turistas en la ciudad”, enfatizó el coronel Higgins.
En lo que va del año, la Policía ha realizado varias capturas de personas que operan de forma similar, mostrando la creciente preocupación por el uso de aplicaciones de citas como herramienta para actividades ilícitas.
Mientras tanto, las investigaciones en torno al asesinato de Finol Lisandro continúan, con el objetivo de identificar a los responsables y esclarecer las circunstancias del crimen.
Roger Urieles
Especial para EL TIEMPO
Santa Marta