Santa Fe sigue escalando, le ganó a Alianza en El Campín y se afianza entre los ocho

Pudo haber sido uno de esos partidos que tanto se han visto en los que el arco rival no se abre y el adversario se defiende con furia y todo se enreda, pero Santa Fe no dejó que fuera así, fue tanto lo que dominó y generó y lo que pateó, que el balón finalmente iba a terminar entrando, y anotó dos veces, y con ese 2-0 se impuso a Alianza en El Campín, en partido que tenía pendiente en la Liga y llegó a 19 puntos. Santa Fe ganó bien.

Santa Fe regresó a su casa, extrañaba El Campín, y no dejó que Alianza empañara su regreso. Hubo poca gente en las tribunas, los valiente que desafiaron el frío y la lluvia y que se fueron felices con dos goles y con tres puntos. 

El equipo cardenal fue superior, muy superior, encontró a un rival frágil que jugó a defenderse y terminó pagando caro.  Y eso que su portero, Mosquera, era héroe, era el encargado de amargar a los leones, que le pateaban y le pateaban y no podían vencerlo.

Antes del primer gol Santa fe ya lo había intentando mucho,  Harold Mosquera capturó un rebote, lanzó un remate que puso a pelota a picar en el pasto y pasó cerca. Luego intentaron Juan Pablo Zuluaga y Albornoz, la media distancia era la fórmula. 

Fue cuando Hugo Rodalllega reclamó presencia, reclamó la pelota, le llegó un centro perfecto y su cabezazo exigió al portero que evitó el gol. Incluso a Rodallega le anularon un gol, por posición adelantada previa del asistidor, Mosquera. 

El goleador quería celebrar, buscó y buscó, en otra opción quedó de frente y al rematar, cuando el gol ya se gritaba en las tribunas, el arquero Mosquera atajó otra vez, puso las rodillas y vitó el gol.

El segundo tiempo arrancó igual, Santa fe con el dominio y Alianza luchando por llevarse un empate. Una vez más Rodallega probó, sacó un riflazo y ahí estaba Mosquera para proteger su arco. 

Santa Fe no se desesperó nunca, con paciencia, pero con agresividad, siguió buscando el gol del triunfo. Hasta que se iluminó Jhojan Torres, quien desbordó por la zona derecha y lanzó un centro letal, allí en el área entró en un gran movimiento Zuluaga que se lanzó y peinó el balón para, por fin, vencer a Mosquera. 

Ya con la ventaja, era otro partido. Alianza no tenía más remedio que salir de su guarida, intentar alguna gesta, pero al más mínimo espacio, recibió el segundo. Santa fe lo atacó con muchos hombres, la defensa no podía despejar, la pelota finalmente le cayó a Millán que tiró un centro con intención de remate y Mosquera  solo tuvo que poner su pie para que la pelota amortiguara y fuera adentro, al minuto 56.

El sinsabor fue para Rodallega que una vez más se quedó son gol, tuvo una más, un tiro libre pero ya sabemos quién estaba en el arco para aguarle la fiesta, el arquero Mosquera. Santa Fe ganó bien. Llegó mucho, pateó mucho y celebró dos veces.

PABLO ROMERO

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