Robert Pattinson habla de la película 'Mickey 17': 'Es un personaje bastante ridículo, pero con mucho corazón’

El surcoreano Bong Joon Ho está incluído en la lista de los 25 mejores directores de cine del siglo XXI. Méritos le sobran: no solamente es un cineasta audaz, al exponer en la pantalla mucha de la basura que las sociedades esconden debajo de la alfombra, sino que a sus producciones les imprime un sello que va de la risa y la incomodidad hasta el desconcierto. En su filmografía se incluyen, entre otros, los títulos Memorias de un asesino, The Host, la serie Snowpiercer y Parásitos, esta última, la primera cinta de habla no inglesa en ganar el premio Óscar a la mejor película en el 2019, y también la primera en recibir la estatuilla en esa y en la categoría de filme internacional el mismo año.

'Mickey 17' es su nueva propuesta cinematográfica. En este relato hay drama, suspenso, humor negro y ciencia ficción, pero sobre todo, hay mucha crítica social, a las políticas extremistas y a las prácticas científicas inescrupulosas. Claro que este filme no sería lo mismo si Robert Pattinson no fuera su protagonista, porque si usted se quedó solamente con el joven Pattinson que se dio a conocer en la saga de Crepúsculo se ha perdido de un actor de alto calibre. La historia de 'Mickey 17' sigue a Mickey Barnes, que por una deuda impagable en la Tierra por la cual van a matarlo, decide incorporarse como ‘prescindible’ en un viaje experimental a otro planeta. En la travesía, morirá una y otra vez, como parte de su cotidianidad, en la que experimentará vacunas en prueba, virus mortales, exposición a climas infrahumanos y será el ejemplo de cómo la clonación humana es un éxito. Hasta que dos versiones suyas, que son absolutamente opuestas, deban coexistir al mismo tiempo.

“Yo acepté este papel porque está la firma de Bong Joon Ho: hace tragicomedias, y es un género bastante raro, la comedia, la ciencia ficción, la tragedia, todos combinados, son diferentes y arriesgados. Pero, además, el guion era inusual, el humor era inusual, incluso su estructura era bastante inusual. Y también, el hecho de jugar contra uno mismo; en la primera lectura, era como, ‘vale, lo entiendo’; pero cuando empiezas a desmenuzar el guion, hay muchos aspectos que parecen difíciles de conseguir. Sin embargo, el director lo logró”, dice Pattinson, que ha derrochado su talento en filmes como El faro, Tenet, Batman o Waiting for the Barbarians. En 'Mickey 17', que llega a los cines del país este jueves 6 de marzo, comparte créditos con Naomi Ackie, Toni Collette y Mark Ruffalo.

Hablemos de Mickey Barnes y de dónde está cuando empieza la historia.

Siempre me gusta describir a Mickey Barnes como un pastelero fracasado, que básicamente intentó montar una tienda de macarons en la Tierra y se ha quebrado. Ha pedido un préstamo a gente de muy mala reputación y no puede devolverlo, así que intenta huir del planeta. Pero al hacerlo no lee la letra pequeña de su contrato de colonización espacial y se ve abocado a una vida infernal. Aunque como su vida era tan horrible de antemano, es como si fuera lo mejor que le ha pasado. Es un personaje bastante ridículo, pero con mucho corazón.

¿Cómo fue su primera reunión con el director ?

Estaba muy nervioso. No sabía nada del proyecto y él es una figura legendaria, no tenía ni idea de qué esperar. Nuestra reunión fue muy divertida, porque él quería dar vueltas sobre el tema de la película y no decir nada al respecto, y todo esto se estaba traduciendo. Fue un encuentro muy entretenido y me gustó mucho la primera vez que lo vi. También me gustaron mucho las interpretaciones que consigue de los actores en sus películas, y sabía que hiciera lo que hiciera, iba a ser algo muy inusual, eso es lo que me atrae.

Y el rodaje con él al mando, ¿cómo transcurrió?

Es curioso, porque no hablamos mucho sobre el personaje ni nada parecido. Tuvimos un montón de cenas previas y hablamos de fútbol la mayor parte del tiempo (risas). Pero en un plató como este, en el que todo es enorme -una nave espacial gigantesca, estás en un planeta diferente, un reparto y un equipo enorme, mucha gente de fondo-, crees que vas a estar más nervioso de lo que realmente acabas estando. Hay algo en la actitud de Bong, es muy tranquilo todo el tiempo y tiene ese aire de diversión benigna cuando dirige, parece que nada va a salir mal cuando trabajas con él. Creo que todo el mundo confió mucho en él y fue un plató muy agradable.

¿Qué cree que tienen sus películas que gustan tanto en todo el mundo?

Creo que es una de esas personas con una perspectiva única. Es curioso. Uno piensa que la persona que puede conectar con el público más amplio es la más afín, pero creo que Bong es un tipo fuera de lo común. Sólo ve las cosas desde su punto de vista. Supongo que es lo que tiene cualquier artista brillante: una visión singular que hace ver a los demás las cosas de otra manera. Cuando ves sus películas, entiendes que nadie más podría haberlas dirigido. Son únicas.

Con Mickey 17 y Mickey 18, ¿cuáles fueron los mayores retos a la hora de interpretar dos versiones distintas del mismo personaje y de jugar casi siempre contra uno mismo?

La mayor dificultad es que estamos en una nave espacial y no hay muchos otros tripulantes en la nave, así que no pueden ser muy distintos de los demás personajes de la historia, pero sí tienen que ser muy distintos para el público. Pasamos por un montón de cosas estéticas: orejas protésicas, mejillas muy regordetas. Me alegro mucho de que no funcionaran. Cuando lo descifras, te das cuenta de que tienes que hacer muy poco estéticamente para mostrar a la audiencia que estos son tipos diferentes. Sólo una mirada en tus ojos puede más que cualquier otra cosa. Pero es una locura cómo funciona, puedes ver quién es quién inmediatamente.

Comparte muchas escenas con Naomi Ackie (Nasha) y la relación entre ella y Mickey es algo maravilloso de ver...

Naomi es muy divertida, inusual y salvaje. Nunca podía predecir lo que iba a hacer. Pero también es muy cálida. La relación entre Nasha y Mickey es bastante extraña. Mickey es una persona inusual, no es ese el tipo con el que una chica quiere estar. Ni siquiera es realmente humano, y a ella no parece importarle en absoluto. Ella ve más allá de los defectos hasta un punto bastante extremo. No juzga un libro por su portada. O tal vez sí, extremadamente, tal vez le gusta mucho la portada y no le importa el contenido (risas).

CULTURA EL TIEMPO (*)

(*) Con una entrevista cedida por Warner Bros

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'Anora' ganó como mejor película en los premios Óscar | El Tiempo